S.B.H.A.C.

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2.6- Galería de personal del Ejército Popular

(Militares profesionales, de milicias, y soldados y milicianos)

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SIGNIFICADO ICONOS

 Francisco Sabaté (Quico).

Militante confederal que durante la guerra combatió en la columna "Los Aguiluchos" y posteriormente en la 26 división. Parece que mató a un comisario comunista de una unidad próxima a la suya por haber enviado según su opinión a la muerte segura a una compañía anarquista. Lo cierto es que fue detenido por el SIM republicano y que consiguió evadirse para continuar la lucha. Pero es después de la guerra cuando este valiente anarquista se distingue en la guerrilla libertaria catalana de los años cincuenta pasando a convertirse en un mito por su astucia y audacia. Murió en Sant Celoní, cerca de Barcelona, el 5 de enero de 1960, luego de una terrible lucha y huida, herido de muerte, sólo.

 

 

Fernando Sabio Dutoit

Capitán de Intendencia retirado que mandó unidades milicianas al principio de la guerra. Era masón. Con la guerra se encontraba en Madrid y pertenecía a la UMRA. Ingresó en Quinto regimiento del que fue nombrado jefe honorario del Quinto Regimiento. Mando fuerzas milicianas en la Sierra y al poco ingresó en el Cuerpo de Carabineros según la disposición de Negrín a la sazón Ministro de Hacienda en el Gobierno de Largo Caballero. Una de las primeras seis Brigadas Mixtas fue para él, concretamente la Quinta. A estas brigadas, junto con las dos internacionales recién creadas les tocó lo más duro de la batalla de Madrid, mejor de las batallas por Madrid. En una de las acciones contra el Cerro Garabitas en la Casa de Campo, Sabio resultó herido. Después, ya restablecido, mandó la 13 división, recién creada con la base de la 5 Brigada Mixta. Era marzo de 1937. Ascendido a teniente coronel se le dio el mando de la zona catalana del Instituto de Carabineros. Una de sus tareas más citadas es las gestiones que tuvo que realizar con el gobierno de Andorra para que impidieran las actividades de rebeldes y quinta columnistas que se acopiaban de material en Andorra. Al final de la guerra pasó al Estado Mayor del Grupo de Ejércitos de la Región Oriental. Desde Cataluña partió al exilio.

 

Rafael Sabio Dutoit

Ingresó en la academia de Ingenieros de Guadalajara a los 17 años y fue destinado al regimiento de Ingenieros de Melilla como teniente. Participó en la guerra de África y se le distinguió con la Cruz del Mérito Militar con distintivo rojo. Caso en 1919 con Antonia Osteret hija de un general de caballería. Para ganarse un sueldo realizaba proyectos civiles de ingeniería, una cosa muy corriente en las armas técnicas. Rafael Sabio se especializó en ingeniería de medios de salud y sanitarios, destacando entre sus obras el Hospital Civil de la Línea de la Concepción. Rafael Sabio desarrolló conocimientos muy importantes en el saneamiento de localidades menores participando en seminarios y asociaciones sobre la higiene de los lugares comunes. Era miembro de la Junta directiva de la Sociedad Española de Higiene y de la Asociación de Ingenieros y Arquitectos Sanitarios. Igualmente era socio de la conocida Asociación Española para el progreso de las Ciencias creada en 1908 y que metió a España en el asociacionismo científico con la celebración de sus afamados congresos donde la ciencia española se ponía al día extendiendo el regeneracionismo y la preocupación educacional por el solar patrio, repoblando como decía Cajal, las mentes y los campos. En 1933 recibió la medalla de oro del II Congreso de Medicina y Farmacia Militares por su proyecto de Sanatorio Antituberculoso. En 1934 demostró sus conocimientos sobre los usos del corcho puro aglomerado como elemento de construcción recibiendo un premió de la Comisión Mixta del Corcho.

Al estallido de la guerra era comandante de Ingenieros y fue pionero en el tratamiento y conservación de monumentos de Madrid mediante su sistema de blindaje antiaéreo, del que son ejemplos la fuente de la Cibeles y la fachada del Hospicio. Formaba parte del mando de la Comandancia de Obras y fortificaciones y fue ascendido a teniente coronel en el frente de Madrid participando en las fortificaciones de la capital.

Al final de la guerra fue detenido, encausado y depurado. Como el Ejército de Franco andaba escaso de ingenieros con experiencia en fortificaciones se le ofreció en 1939 trabajo de ingeniero civil para el plan urgente  de  fortificaciones del Campo de Gibraltar que Franco quería a toda costa. Rafael Sabio reunió a su equipo de antes de la guerra y fue protagonista de esta obra militar llamada "la muralla del Estrecho" junto con miles de presos republicanos que formaban los batallones de trabajadores del Ejercito. En 1944 fue indultado y sobreseído su expediente de responsabilidades políticas.

Benito Sacaluga Rodríguez (1882-1939)

Teniente coronel maquinista de la Armada y Jefe de los Servicios de Máquinas de la Escuadra de la República. Maquinista del Submarino Isaac Peral. Jefe de Máquinas del Acorazado "Jaime I". Jefe de los Servicios de Inspección de Máquinas de la Flota Republicana. Director de la Escuela Naval Popular de Cartagena. Al final de la guerra fue detenido procesado y fusilado. Un familiar del personaje ha confeccionada la página web (blog) más importante de la Flota Republicana: buques, personajes, eventos y represión. No se la pierda.

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Eduardo Sáenz Aranaz

Ingresó en la Academia de Infantería de Toledo en la misma promoción que Franco, Yagüe (F), Alonso Vega (F), Asensio Cabanillas (F) y Asensio Torrado (R). Destinado al regimiento de infantería América nº 14 no tardó en ser enviado a África en la zona de Larache donde sirvió en la Policía Indígena. Fue profesor de la Academia de Infantería, y de la Academia General Militar de Zaragoza especialmente llamado por su director, entonces Franco. Pasó luego a la Escuela de Estudios Militares Superiores para conseguir el diploma de E.M. En julio de 1936 estaba destinado en la Escuela Central de Tiro. Acometido por terribles dudas, tomó la decisión de comunicarse telefónicamente con el Ministerio unos días después. Fue adjunto como jefe de Estado Mayor a la columna que mandaba el coronel Asensio Torrado, en el frente de Guadarrama. Formó también parte del temprano E.M. del Ministerio de la Guerra. En marzo de 1937 tuvo plaza en el E.M. de la 3ª división Orgánica. Fue también profesor de táctica de la Escuela Popular de Estado Mayor y más tarde se le nombró Jefe del Estado Mayor del Ejército de Levante. En diciembre de 1937 fue ascendido a coronel por meritos de guerra.

El Buró de Información y Control se opuso a su nombramiento como jefe de E.M. del Ejército de Extremadura en 1938. No obstante, Miaja, como jefe del Grupo de Ejército, insistió. Poco después obtuvo el traslado al E.M. del Grupo de Ejércitos del Centro como jefe de la 3ª Sección. Sorprendentemente se afilió al PSOE en el verano de 1938. Al final de la guerra era coronel.

Tras el putsch del coronel Casado fue detenido por los franquistas en Alicante e internado en el castillo militar de Monteolivete, juzgado el 20 de julio de 1939 en sumarísimo y condenado a muerte. Afortunadamente para él, algunos compañeros de promoción le avalaron y le fue conmutada la pena en agosto por 30 años, y en diciembre de ese año rebajada a 12 años. Su historial de prisión es el típico del preso republicano condenado a larga pena, lo que se llamaba el turismo carcelario. Un penal detrás de otro. En 1943 le fue primero concedida la libertad condicional y más adelante fue amnistiado. Encontró trabajo civil en Almería en una compañía minera y ya en 1945 partió para Madrid. Continuo su militancia en el PSOE, ahora clandestina, y fue detenido en la gran caída de abril y mayo de 1946. Nuevo consejo de guerra donde fue condenado a ocho años que cumplió primero en Madrid y con mucha dureza en el destacamento penal de Cuelgamuros, construyendo el Valle de los Caídos. Menos mal que era compadre de Franco... Quedó libre en 1950. Murió en 1979. Había publicado en 1930 el libro: "Reflexiones sobre el arte de la guerra"

Alejandro Sáenz de San Pedro y Albarellos

Militar profesional, adscrito a la masonería. Nacido en 1894 en Burgos y capitán de infantería en julio de 1938 destinado en Valencia en el regimiento Guadalajara nº 10. Había servido en los Regulares de Melilla y también en Larache. Fue herido en África al menos en dos ocasiones y fue distinguido y condecorado varias veces, cuatro cruces al mérito militar. En 1923 rompió con su logia mientras se recuperaba de sus heridas en el hospital militar. Era simpatizante de Azaña.

En julio de 1936 como capitán en el regimiento de infantería Guadalajara (Paterna, Valencia), se opuso a las aventuras golpista del coronel del regimiento y tras parlamentar con la oficialidad consiguió terminar la intentona golpista. Recibió el mando de la compañía nº 14 de guardias de Asalto con la que sirvió en el cerco del Alcázar de Toledo. Posteriormente, ascendido a mayor, mandó la 225 B.M. formada con batallones de defensa de costas, y destinada en la costa Levantina. Con esta brigada participó en los intentos de contención de la ofensiva rebelde de la primavera del 38. Para la batalla de Valencia ya mandaba la 64 División en el XIX C.E en cuyo mando relevó a Martínez Cartón. En octubre del 38 se incorpora al ejército de Extremadura como teniente coronel donde toma el mando del VIII C.E. relevando al coronel Pérez Salas en el frente de Córdoba. Con la rebelión de Casado, fue relevado del mando del VIII C.E. Capturado por los franquistas y enviado a un castillo militar fue juzgado por sumarísimo de urgencia y condenado a muerte por rebelión militar. No se le perdonaba que liquidara la rebelión en Valencia. En agosto de 1939 fue fusilado en Paterna. Tenia 45 años.

 

Juan Sáez de Diego.

Era Guardia de asalto cuando se incorporó voluntario a las Milicias Populares.  Al final de la guerra se encontraba al mando de la 27 Brigada Mixta, una unidad de escaso historial que cubría un frente atrincherado de nula actividad. Al golpe de Casado, Sáez de Diego, ya entonces afiliado al PCE, fue sustituido por el mayor de milicias Fidel Benito Bernaldo de Quirós que era más de la confianza de Casado. Detenido por los franquistas y dado su pertenencia al Grupo de Asalto del que salio la camioneta 17 para el asesinato de Calvo Sotelo, fue condenado a muerte, que se cumplió a finales abril de 1944.

Mariano Salafranca Barrio

Talavera, agosto de 1936. Por la izquierda, el diputado de I.R. Barnés y el coronel Salafranca y el general Riquelme, jefe del sector, preparando la defensa de la ciudad

Era hermano del conocido héroe de Annual, Juan Salafranca Barrio. De ideas conservadoras, era el Gobernador Militar de Ciudad Real y el 18 de julio se encontraba en Madrid celebrando la boda de su hijo. Su idea del deber y la lealtad le hizo ponerse a las órdenes del gobierno que le envío a su demarcación con la orden de presionar con fuerzas leales sobre Granada, tomada por los rebeldes. A finales de agosto, Salafranca se encuentra en Talavera con Saliquet que no puede contener a la Columna de la Muerte, llamada así por el reguero de muertes de civiles republicanos que venía dejando en cada uno de los pueblos donde entraba desde su salida de Sevilla. Salafranca sustituye a Saliquet en Talavera. Su opinión de las columnas milicianas es demoledora, pero eso es lo único que tiene la República para defenderse. Salafranca recibe refuerzos y cuenta con aviación lo que entorpece la marcha de Yagüe aunque no por mucho tiempo pues la aviación rebelde derrota a la republicana y con ello queda dueña del cielo y la ofensiva de los africanistas puede continuar sin oposición pues las milicias no son capaces de resistir los bombardeos artilleros y aéreos (1). La derrota de Talavera tumbó al gobierno Giral sin que le diera tiempo a preparar su Ejército de Voluntarios que se entrenaba en Albacete. El nuevo gobierno cesó a Salafranca y puso a Asensio Torrado. Salafranca pasó al Teatro de Operaciones de Sur, concretamente al sector de Granada. En febrero de 1937 Salafranca es enviado a Almería por Largo para taponar la brecha que la toma de Málaga por los italianos había producido. La política militar de Asensio entra en crisis, aunque se consigue detener a los rebeldes en Motril. Regresa Salafranca al Ministerio de la Guerra ignorando nosotros que puestos ocupó. A finales del 38 recibe la orden de ocupar la plaza de subjefe del E.M. del Ejercito de Andalucía. Con la derrota consigue exiliarse a Francia y de allí a Méjico donde se instaló. Mariano Salafranca murió en 1946 de una enfermedad pulmonar

 

(1) Al hilo de este personaje, le recuerdo al lector que las aguerridas tropas rebeldes del Ejercito de África apenas avanzaban cuando no tenían la superioridad artillera y aérea. En Talavera, en el Norte, en Brunete, en el Ebro y en todos los sitios, como muy bien cuentan los cronistas militares republicanos, especialmente Ciutat, escrupuloso oficial de E. M. que todo lo apuntaba y que sirvió en el E.M. del Norte y de Levante y que lo cuenta en sus memorias con datos irrefutables. Lo que por otro lado ocurre en todos los ejércitos del mundo, sin superioridad de fuego, no hay avance que valga, ahora y desde la invención de la artillería de línea (Napoleón). Y digo esto por la cantidad de majaderías de tipo táctico y militar que hemos tenido que leer (mejor tragar) los aficionados republicanos de la historia militar de la Guerra Civil española, cuando no había más libros que los de Arrarás, Aznar, Salas, Bande y similares propagandistas militares de los mitos del franquismo que recrearon la guerra (en el papel) con una escuadra de falangistas, otra de carlistas, un pelotón de legionarios y tres regulares que pasaban por allí. En concreto la historiografía militar franquista (sobre todo Bande) relata el avance de la columna de la muerte como una epopeya napoleónica cuando se enfrentaba a milicianos mal armados, peor dirigidos y sin ninguna experiencia militar por el valle del Guadiana. En realidad era una guerra colonial con visos de genocidio.

Fernando Salavera Camps

Militar profesional natural de Barcelona nacido en 1889. En julio de 1936 era comandante de infantería en el regimiento Alcántara nº 14 en Barcelona. Se interpuso junto con otros oficiales leales en los planes golpistas de la oficialidad de su regimiento. Por este motivo fue nombrado asesor militar de la columna Ortiz en Aragón que salió para Aragón el 24 de julio y el día 25 tomaba Caspe. En la primavera de 1937, tras varios destinos en el Ejército de Cataluña recibió el mando de la 18 Brigada Mixta en el frente del Centro hasta que en junio de ese año ascendido a teniente coronel y se le nombró comandante de la 43 división con lo que volvió al frente de Aragón. En diciembre de 1937 cedió el mando de esta unidad y el febrero de 1938 tomó el mando del XIII Cuerpo en el frente de Teruel.

Tras la caída de Cataluña pasó a Francia y tras la invasión alemana, quizá metido en operaciones de la resistencia, fue detenido por la Gestapo y deportado al campo de concentración Vernet d'Ariège y tras el cierre de este campo trasladado a Dachau (Alemania) en el tristemente famoso "Tren fantasma". Fue asesinado a principios de 1945 en este campo. Tenía 56 años. Es uno de los componentes del famoso grupo de militares republicanos asesinados por los nazis en campos de exterminio: "Los ocho de Vernet".

 

Enrique de Salcedo Molinuevo

General al frente de la VIII División (La Coruña). Había nacido en Salamanca en 1871. Tras salir de la Academia de Infantería participó en la campaña de Cuba y en la de Marruecos en la que fue condecorado. Tras volver a la península y alcanzar diversos puestos en la milicia y formar una familia. En 1928 ascendió a general de división. A la llegada de la II República era gobernador militar de Tarragona. Fue nombrado Comandante General de Canarias en 1931, antes de la reforma de Azaña de las Divisiones Orgánicas. No acompañó a Sanjurjo en 1932 en el golpe antirrepublicano pese a que era intimo amigo. Al inicio de 1936 fue nombrado al mando de la VIII División Orgánica (La Coruña) y confirmado tras las elecciones de febrero. Se dice que Salcedo estaba al tanto de lo que se fraguaba, pero como otros generales, no quiso implicarse ni a favor ni en contra, lo que finalmente les costó la vida a la mayoría. El caso es que el día señalado, el 20, y sin haberse decidido ni haber recibido consigna de su amigo Sanjurjo que acababa de morir en Lisboa al estrellarse la avioneta que le trasladaría a Marruecos, Salcedo no quiso rebelarse y tras reunirse con el general Caridad Pita, gobernador militar que le informó de los cabecillas de la rebelión, se dirigió a Capitanía donde tras ser conminado a rebelarse y negarse, fue arrestado por su desleal jefe de E. M. el coronel Luis Tovar Figueras, quien ordenó su arresto. A partir de aquí su destino se dirigió irremediablemente a la muerte. Internado junto con Caridad Pita en el buque correo Plus Ultra, rápidamente habilitado como prisión, fue juzgado, condenado y fusilado el 9 de noviembre en el Castillo de San Felipe.

Benjamín Salvador Gil.

Alcanzó el grado de mayor de milicias y sirvió en la 99 Brigada Mixta del I Cuerpo del Ejército del Centro. Al golpe de Casado, la brigada se posicionó con Casado bajando a Madrid para combatir a los leales al gobierno. Tras el triunfo del golpe el comandante de la 99, Casto Losada Quiroga fue ascendido al mando de la 2 División y Salvador Gil tomó el mando de la 99 Brigada Mixta. Los franquistas lo mantuvieron en prisión durante casi tres años y su causa fue finalmente sobreseída.

 

Alfredo San Juan Colomer

Comandante de Infantería y de Aviación. Había nacido en Barcelona en 1892. Fue número 1 de su promoción. Era piloto militar y profesor de aeronáutica. Hizo los primeros años de carrera en África, en Regulares, y más tarde como jefe de una escuadrilla de aviones de caza. Es el prototipo del militar republicano e intelectual, por lo que se le eligió para la organización y dirección de los centros docentes dependientes del Ejército. En julio de 1936 era diplomado de Estado Mayor y había sido profesor en varias Academias de Infantería. Había ampliado estudios en Versalles, donde se diplomó en Carros. Fue también Director de la Escuela de Aplicación Tácita del Ejército. El Ejército de Cataluña se estructuró a finales de 1936 según un proyecto de San Juan Colomer a partir de sus estudios y publicaciones. El mismo encabezó el E.M. de este ejercito de tres divisiones, más una cuarta postrera. A lo largo de la guerra desempeñó los cargos de director de la Escuela de Estado Mayor Central y de la Escuela Popular de Estado Mayor. También sirvió con Vicente Rojo como Jefe de la sección de operaciones en el E.M.C. del Ejército Popular. Se exilió a Méjico donde ejerció de profesor de vuelo y también en la Universidad de Nuevo león. Libros de texto suyos son "Elementos de aplicación al estudio del tiro de Infantería", con un prólogo del general Varela; "Lo que conviene saber en aviación militar" (colección dirigida por el general Rojo) y Mandos y estudios militares. En México publicó un Manual de aviación (1941).

 

Ángel de San Pedro Aymat

General jefe de la VII Brigada de Infantería, con destino en Barcelona. Mantuvo su fidelidad al Gobierno y acató las órdenes que le impartió el general de la División Llano de la Encomienda. En el Cuartel de Pedralbes es detenido por un oficial rebelde, como lo había sido antes el jefe de la unidad. Fracasado el golpe en Barcelona fue puesto en libertad. No debía de gozar de la confianza del Comite de Milicias pues no se le ofreció ningún puesto de mando real. Tampoco en el Ejército de Cataluña, y tampoco en el Ejército Popular. Al final de la guerra fue condenado a 12 de años por un tribunal franquista con pérdida de derechos pasivos.

Imagen: Santiago de San Pedro

 

 

 

 

 

Rosario Sánchez, "Rosario Dinamitera".

Rosario Sánchez perdió su mano derecha en combate, pertenecía a las JSU. Ascendió a Sargento y tuvo cargos de responsabilidad en su división. Miguel Hernández le dedicó un poema: "Rosario Dinamitera". Sobrevivió a la guerra y a la durísima posguerra que le impuso el régimen franquista y sin renunciar a sus actividades políticas.  En la imagen, perteneciente a la colección personal de Rosario, se discute con Valentín González y un asesor soviético si la heroína debe mostrar su muñón en un acto político.

 

 

Hipólito Sánchez

De la sección de Enlace de la compañía de la Plana Mayor de la 9 Brigada Mixta. En la batalla de Guadalajara yendo de avanzadilla pegado a la retaguardia italiana que huía consiguió hacerse con una ametralladora Fiat, un Fusil Ametrallador y otras armas, incluyendo bombas de mano. El comandante de la  Brigada, mayor Pando, lo ascendió a teniente en el campo de batalla. Su nombre aparece en una lista de una de las fosas madrileñas, en Griñón. Aunque no tenemos constancia de que se trate de este valiente soldado republicano.

Narciso Sánchez Aparicio

Comandante de Infantería. Había sido procesado en Melilla en 1923 por la justicia militar por su actuación en la posición de Tisignore durante la retirada tras el desastre de Annual, en la que sus hombres fueron masacrados y el cayó preso de Abdelkrim.  Durante la guerra sirvió lealmente al gobierno Giral que le encargó organizar un batallón de voluntarios el 19 de julio de 1936. También participó en la organización del Quinto Regimiento.

Fue Jefe de la Escuela Automovilística del Ejército. Ejerció de Jefe del E.M. del XVII Cuerpo y más tarde también  fue jefe de E. M. del XXIII Cuerpo. Recibió la medalla de sufrimientos por la patria en mayo de 1938. Detenido por los franquistas al final de la guerra fue sometido a juicio sumarísimo y condenado a muerte. Que fue ejecutada en enero de 1940 en el campo de tiro de Casillas de Córdoba.

   

Luis Sánchez Codés

Era capitán del cuerpo de Carabineros con destino en Navarra, pero el 18 de julio se encontraba en Madrid. Fue llamado para formar parte de la 5 Brigada Mixta de carabineros que se organizó en Villena con fuerzas de este instituto. El comandante de la brigada era el capitán de intendencia Fernando Sabio Dutoit que se había alistado al cuerpo de carabineros. Sabio fue herido en los duros combates del asalto al cerro Garabitas. Luis Sánchez Codés, comandante de carabineros recibió el mando de la brigada y fue ascendido a teniente coronel.

Juan Sánchez Ferragut

Comandante del crucero Cervera en el momento de la rebelión en la Base Naval del Ferrol pendiente del dique seco donde se encontraba el crucero ligero. Junto con su tripulación se mantuvo leal y combatió mientras pudo a los facciosos, no podía defenderse a cañonazos sin correr graves riesgos de modo que disparó con piezas pequeñas sin resultados. Tanto Ferragut como su tripulación no sabían qué estaba pasando hasta que poco a poco la llegada de civiles les aclaró las cosas. A poca distancia la tripulación del acorazado España también se defendía copn valor. Pasadas las horas y la tripulación se descorazonaba, además, los rebeldes radiaron mensajes como si vinieran de Madrid donde les impelía a entregarse. Y aunque era mentira funcionó. Fue encausado tras la rendición de la dotación, y pese a que se había firmado un documento donde los rebeldes se comprometían a no tomar represalias, fue condenado a muerte, probablemente, en opinión de Marcelino Laruelo Roa, para librarse de tan incomodo testigo. Su segundo, el Teniente de Navío Luis Sánchez Pinzón, en iguales circunstancias, fue fusilado también, tras una pantomima de Consejo de Guerra. El primero fue asesinado el 25 de septiembre de 1936 y el segundo justo un mes antes. La tripulación fue también duramente expurgada y enrolada en el España como si fuera un batallón disciplinario.

Fuente: Marcelino Laruelo Roa.

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Rafael Sánchez Guerra.

Este político más que militar, (era teniente de complemento) había sido secretario de la presidencia con Alcalá Zamora y al 18 de julio era concejal en ayuntamiento de Madrid. No las tuvo todas consigo en los primeros meses de la guerra, dado que era muy conservador y campaban a sus anchas amenazadores cafres de todos los colores. Casado le protegió llevándoselo a finales de 1937 como oficial ayudante a su Estado Mayor, temprano nido de espías, quintacolumnistas y emboscados. Naturalmente apoyó a su jefe sin reservas en marzo de 1939. Permaneció en Madrid, creído de que sería tratado con benevolencia por los franquistas. Pero otro que se equivocó, le condenaron a 30 años y pudo salir en libertad vigilada en 1944. Se exilió a Francia y, ya ferviente republicano, participó en los gobiernos republicanos en el exilio. Desde Argentina publicó "Mis prisiones", interesante crónica a todas luces para un político de derechas que tampoco hubiera estado muy bien visto de haberle pillado en zona rebelde.

Casadista

Alberto Sánchez Menéndez

Nace en La Habana el 26 de febrero de 1915 en el seno de una familia obrera. A los 15 años de edad se incorpora a las luchas estudiantiles contra la tiranía machadista a partir del asesinato el 30 de septiembre de 1930 del estudiante universitario Rafael Trejo, mártir que se convierte en bandera nacional de aquella contienda a la que se une todo el pueblo de Cuba. Participa, igualmente, en cuantas actividades y manifestaciones de repulsa al oprobioso régimen de Gerardo Machado se realizan en Pinar del Río, provincia natal de su padre. Es apresado en 1931 por la fuerza represiva del tirano y recluido en el Castillo del Príncipe durante algunos meses. Al término de esta breve condena, sale a conspirar aun con más bríos. Al ser depuesto el tirano viene a La Habana e ingresa en la Policía Técnica, donde establece relaciones con grupos revolucionarios. Combate contra los ex oficiales contrarios al golpe de los sargentos, clases y soldados del 4 de septiembre de 1933; contra la asonada contrarrevolucionaria del 8 de noviembre del propio año, alentada por la coalición reaccionaria Menocal-ABC y amparada por la embajada yanqui. Es ávido de obras de contenido social y, muy especialmente, de los escritos martianos. Al ser impuesto por Batista y el embajador norteamericano Caffery, el gobierno de Mendieta, Alberto Sánchez ingresa en la recién fundada TNT —organización conspiradora de acción liderada por Antonio Guiteras— que después devendría en la combativa y antimperialista Joven Cuba. Como tal, cumple misiones riesgosas. La huelga de marzo de 1935 lo encuentra entre sus principales activistas. Cuando Guiteras prepara su salida por El Morrillo, Matanzas, rumbo a México, para preparar una invasión armada a Cuba, Alberto está entre los que le acompañan; pero la traición de dos oficiales de la marina de guerra comprometidos, conduce al combate desigual en ,que caen gloriosamente Guiteras y el venezolano Aponte, entre otros. De este cruento enfrentamiento Alberto logra huir. Poco después abandona clandestinamente el país. Luego de un forzoso peregrinaje por la América Central: Panamá, Honduras, El Salvador... Lázaro Cárdenas lo ampara en México. Pero su anhelo es regresar a Cuba para contribuir a su liberación, lo que realiza clandestinamente en 1936. En Cuba, las perspectivas inmediatas de lucha de liberación están cerradas; pero en España se forja un proceso que tal vez pueda consolidarse para disfrute de los humildes, y allá marcha a ayudar.

Encarnación LunaEra el mes de marzo de 1936. Ya en España, ingresa en el ejecutivo del Comité de Revolucionarios Antimperialistas Cubanos. Trabaja intensamente en el Socorro Rojo Internacional a las órdenes de Carlos Contreras (Vittorio Vidalli) y de Esteban Vega. Es activista de la Juventud Socialista Unificada de Amigos de América Latina y, como miembro de aquel Comité Antimperialista, trabaja en las campañas pro libertad de Ernest Thaelmann y Luis Carlos Prestes. Estalla la sublevación fascista y no hay que convocarlo para la cita de honor en defensa de la República. Precisamente, el 20 de julio de 1936, está en primera línea entre los heroicos asaltantes al Cuartel de la Montaña, su bautismo de fuego organizado. A partir de esta fecha participa en los más duros y feroces combates; ya la prensa leal lo destaca. Junto a su valentía y arrojo también se desarrolla su conciencia política. Por eso no es de extrañar que en el mes de agosto ya lleve junto al pecho, en el bolsillo superior izquierdo de la guerrera, su condecoración más preciada: el carnet del Partido Comunista Español. En el Quinto Regimiento "Alberto, el Comandante cubano", ya eran nombres y apellidos, por el respeto y camaradería que su actuación origina entre los combatientes. Pelea mucho, pero sus actuaciones más destacadas figuran en Buitrago de Lozoya, Somosierra, Cascones (donde ya es Capitán), tarabitas, Usera, Pozuelo de Alarcón, Aravaca (ya con la estrella de Comandante), Ciempozuelos, Valdemorrillo, Guadalajara, Alfombra (como Comandante en Jefe del Batallón de Ingenieros de la 22 Brigada Mixta), Portalrrubio, Pozoblanco (como Jefe de la Novena Brigada Mixta), Quijorna, Y para sellar más su compromiso con la contienda por la humanidad progresista contrae matrimonio con la Capitana de la Sección de Ametralladoras, Encarnación Hernández, Luna, quien se le iguala a Comandante en la Batalla del Ebro, pero ya Sánchez no puede compartir esa alegría. La batalla de Brunete es una de las más cruentas y costosas en vidas humanas durante la contienda. Se combate desde el 6 de julio hasta el 25 de aquel año de 1937, día y noche. Algunos calculan las bajas entre las 35 mil: 20 mil por el enemigo, 15 mil por los leales. En la mañana del propio 25 de julio, el Comandante Alberto Sánchez recibe una herida grave con gran pérdida de sangre. Se le trata de impedir, desde luego, el regreso al frente, pero... ¿quién iba a vencer su decisión cuando ese legítimo coraje suyo insistiera en no dejar a los suyos sin su mando decisivo? ¡Nadie! Y Alberto regresa a tomar el mando de sus hombres. Horas después, arengando desde las primeras líneas, una bomba enemiga le siega el impulso. Es tendido en el local del Quinto Regimiento y cubierto con la Bandera Roja. Un dato final recapitula su gloria: muchos libros donde se ha historiado la Guerra de España mencionan con orgullo, junto al obrero Policarpo Candón, al estudiante Alberto Sánchez, ambos cubanos, ambos Comandantes, ambos héroes del internacionalismo proletario.

María Luisa Lafita. La Habana, mayo de 1977. Inédito.

Nota.- Alberto Sánchez era el comandante del batallón especial de la 11 división (Líster) cuando cayó en Brunete.

José Antonio Sánchez Navajas

Militar profesional destinado en julio de 1936 en la plana mayor del regimiento de caballería Lusitania nº 8 como comandante. Como muchos de sus compañeros de la guarnición de Valencia no se decidieron a sublevarse pese a que se esperaba de ellos y algunos amagaron sin éxito quedando en situación ambigua con rebeldes y leales. Tras casi un mes pareció que se plegaban al gobierno como es el caso de José Sánchez Navajas.  Fue éste un jefe de conducta muy irregular, denunciado varias veces como traidor o sospechoso de espía, especialmente por los mandos comunistas. A su actitud, muy confusa, se debió en buena parte la cancelación de la ofensiva sobre Zaragoza después de la conquista de Belchite. Sánchez Navajas fue, o fingió serlo, un oficial entusiasta de la causa republicana. Sus inflamados mítines fueron causa de que las sospechas sobre su lealtad aumentaran. Durante los primeros combates dio pruebas de valor y de adhesión al mando gubernamental, pero después de lo ocurrido en Zaragoza, sospechando quizá haber sido descubierto, se pasó al enemigo con toda la información propia de un teniente coronel de Infantería, grado que ostentaba en aquellos momentos. Sucedió esto en septiembre de 1937, y fue causa de que el Estado Mayor Central hiciera circular profusamente unos impresos entre los combatientes sobre lo que ha de ser la verdadera lealtad. Hubo, asimismo, varias detenciones y algún fusilamiento. En la zona nacionalista, Sánchez Navajas compareció ante un tribunal de guerra que lo condenó a cadena perpetua y lo expulsó del ejército.

Rafael Sánchez-Paredes Pastor

Teniente coronel de Infantería. Nacido en 1883 en un pueblo de Toledo llamado Azaña al que los franquistas cambiarían de nombre tras la guerra. Ingreso en la Academia de Infantería en 1899. Tras diversos destinos, al inicio de la guerra servía en uno de los dos Regimientos de carros de combate que había en España y dotados de los famosos carros Renault FT-17, concretamente el nº 1 de Madrid. Sanchez-Paredes era el segundo al mando del regimiento y era un oficial bien formado pues había pasado por la Escuela Superior de Guerra (Estado Mayor) donde recibió el diploma y donde también se quedó de profesor una temporada. En el verano de 1936 organizó fuerzas militares en dirección a la Sierra con su regimiento y otras unidades regladas. A finales del verano le cayó un chollo del que pronto se libró, pues le fue adjudicado el mando de la comandancia de Málaga, un autentico laberinto como diría Gerald Brenan que vivía en Málaga. El caso es que recibió la orden de organizar la Escuela de tanques del Ejército en la localidad de Archena próxima del puerto de Cartagena por donde desembarcarían, los tanques rusos y los tanquistas. Se sabe que el Partido Comunista de Murcia había recibido instrucciones para ofrecer el balneario de Archena al Ejército. 

Así pues a finales de septiembre, Sánchez-Paredes llegó al balneario de Archena donde la subsecretaria de Tierra pensaba organizar la escuela (y base) de tanques (rusos) de los que bien pronto se dispondrían (llegarían el 12 de octubre). El lugar era estupendo y luego que el ayuntamiento solucionó el problema de los empleados del balneario que naturalmente quedaron cesantes la mayoría, salvo personal sanitario y de cocina. En el ínterin, Sánchez-Paredes se fue a Madrid para organizar al personal seleccionado para tanquistas tras publicarse su necesidad de recluta en la prensa madrileña días antes. Naturalmente también metieron mano sindicatos y partidos y pronto hubo quejas de favoritismo. Se seleccionó principalmente taxistas y chóferes profesionales, todos con avales políticos o sindicales, pero la mayoría fueron comunistas y socialistas, aunque también anarquistas. De paso, a petición del subsecretario, Asensio, se llevó los restos de los carros Renault y algunos autos blindados supervivientes del verano. Y nos podemos imaginar su estado. La único bueno, por decirlo así, es que se bajó los estupendos camiones porta tanques del regimiento.

Sánchez-Paredes se puso manos a la obra para acondicionar el lugar a las nuevas necesidades. Algunos de sus oficiales del regimiento de carros se fueron con él, los capitanes Alfonso Arana Vivancos, Vicente Paredes Viñas, Carlos Faurie Ribera y Manuel Cristóbal. Cuando llegaron los rusos, tras averiguar por sus propios medios a donde tenían que dirigirse y sin nadie de la base, ni de la subsecretaria de Tierra que los orientase, el Kombrig Krivoshein, al mando de la operación, se puso en contacto con los consejeros rusos de Madrid por medio de los miembros del PCE de Cartagena. Tras hablar con Gorev, Krivoshein partió para Archerna y luego de las presentaciones de rigor, aposentó a sus tanquistas, supuestamente instructores, e ignorando totalmente a los mandos españoles de la base, se puso a lo suyo. Y lo suyo era bastante difícil. No tenía traductores, no tenía repuestos salvo los de dotación de la pieza y tampoco tenía mecánicos más allá del conductor-mecánico de dotación en cada pieza.

Los rusos se las compusieron para formas tripulaciones y organizaron pronto pequeñas unidades mixtas de combate que por la urgencia de la guerra partieron para Madrid por distintos medios, ferrocarril, camiones porta-carros o rodando por las carreteras españolas, con lo que suponía de desgaste para los motores del tanque. Sánchez-Paredes quedó en la base hasta que al año siguiente se le encargó organizar la División de Ingenios Blindados, que no era una unidad de combate sino administrativa. Los rusos fueron perdiendo presencia y los españoles fueron más protagonistas de estas unidades blindadas, pero eso no mejoró el rendimiento de las unidades adjudicadas a las divisiones o brigadas participantes en las ofensivas del Ejército Popular. Ignoramos que responsabilidad le cabe a Sánchez-Paredes y sus hombres en las acciones de las fuerzas blindadas republicanas, sobre todo a partir de Brunete donde fueron más autónomas de los militares rusos. En 1938 Sánchez-Paredes fue nombrado Inspector General de las Fuerzas Blindadas. Al final de la guerra en Cataluña, la plana mayor de la División de Ingenios Blindados del G.E.R.O. pasó la frontera, y Sánchez-Paredes con su familia embarcó para Méjico. En el exilió Sánchez-Paredes participó en las actividades de los militares profesionales republicanos y fue ayudado por la J.A.R.E. No era ningún jovencito y tuvo apuros económicos y políticos, falleciendo en 1947

Luis Sánchez Pinzón

Oficial de la Armada nacido en Sevilla en 1906. Teniente de navío en julio de 1936 y segundo de abordo del crucero ligero Cervera y que como su capitán permaneció fiel al gobierno con la mayor parte de la dotación en un desigual combate con tropas de infantería a las que se rindieron tras firmar los rebeldes un compromiso de respetar las vidas de la dotación del Cervera que en esas circunstancias se encontraba en dique seco y con solo parte de la tripulación. Incumpliendo su promesa, los rebeldes lo fusilaron junto a otros marinos y civiles leales el 22 de agosto de 1936 y poco después al capitán del Cervera Juan Sánchez Ferragut.

 

Pedro Sánchez Plaza

Teniente coronel de Caballería, agregado a los de Asalto. Había servido en África y había sido condecorado por sufrimientos y por acciones colectivas. En julio de 1936 mandaba las Fuerzas de Orden Público de Madrid, Guardia de Asalto y Carabineros. Colaboró en la represión de la rebelión del cuartel de Artillería de Vicálvaro (Madrid). En 1937 mandó el XII Cuerpo en Belchite y en 1938 fue nombrado para que se encargase de la reforma de las desorganizadas unidades que huían por Gandesa. A finales de 1938 fue nombrado jefe de Organización del Estado Mayor del Ejército del Este. Sufrió una fuerte depresión según la guerra se perdía y tras haber sido cuestionado en la destrucción del XII Cuerpo en Teruel en marzo de 1938. Quizá, como les pasó a muchos, la guerra perturbó su naturaleza militar conservadora peleando en un bando que no solo perdía sino que le cuestionaba, quizá con razón. No sabemos más, quizá se exilio y rehizo su vida


Reseña de Cristóbal Zaragoza:

Durante el otoño de 1936 está al mando de las fuerzas de Seguridad y Carabineros en Madrid, con el grado de teniente coronel. Es la suya una de las primeras unidades que asaltan Belchite el 28 de agosto, con pleno éxito. Hasta entonces, su conducta es irreprochable en el campo de batalla. Prueba de ello es el hecho de que Modesto, siempre suspicaz, le entrega el mando del XII Cuerpo de ejército, en marzo de 1938, con la misión de cubrir el sector Alcañiz-Caspe. Según Modesto, este Cuerpo de ejército «desapareció del teatro de la lucha» entre el 9 y el 15 de marzo, concluyendo que Sánchez Plaza «entregó al enemigo todo el territorio al sur del Ebro, desde su margen a las proximidades de Montalbán» En realidad, según demuestran los estadillos, el XII Cuerpo de ejército dejó de existir en marzo de 1938, en la contraofensiva nacionalista sobre Teruel. Sánchez Plaza se presentó al alto mando voluntariamente. Fue expedientado y salió sin prestigio alguno después de la campaña de Aragón. Cayó en una gran depresión y no se supo más de él. Queda por despejar la incógnita de si en el momento de iniciarse las operaciones estaba ya enfermo o lo estaba con anterioridad a ellas. En realidad, fueron muchos los combatientes aquejados de graves dolencias nerviosas, especialmente en las últimas se-manas de la guerra y en particular en la batalla del Ebro.

José Sánchez Rodríguez

Militar profesional navarro nacido en 1898. Pertenecía al arma de Ingenieros, especializado en transmisiones, y diplomado de Estado Mayor. Participó en la guerra del Rif aunque desconocemos con que grado. Según los archivos antes de la guerra estaba destinado en el Centro de Transmisiones y Estudios Tácticos de Ingenieros de la 1 División Orgánica. Hay un nombramiento de teniente de ingenieros firmado por el subsecretario de Tierra, Asensio, en enero de 1937. El caso es que fue nombrado jefe de Transmisiones en la Escuela Popular de Guerra nº 4 de Godellla, Valencia con el grado de mayor. En diciembre de 1937 fue nombrado jefe del E.M. del V Cuerpo. Cesó en abril de 1938 y tras ser ascendido a teniente coronel fue nombrado Jefe del E.M. del Ejército del Ebro que mandaba Modesto. Todos los relatores le dan un buen papel. Tagüeña lo nombra a menudo. Al final de la guerra se exilió a Méjico.

Pedro Sánchez Vázquez.

Joven carpintero, militante de UGT y simpatizante del PCE. Se alistó voluntario tempranamente en las Milicias Populares, alcanzó el grado de mayor de milicias en la 42 Brigada Mixta mandando el 167 batallón. En el golpe de Casado la 42 brigada se mostró firme defensora del gobierno. Detenido por los casadistas, los franquistas se lo encontraron en la cárcel de Valencia. Incorporado al sumario del "Expediente de la Junta de Casado" fue condenado a muerte y fusilado el tres de julio de 1941 contra las tapias del cementerio del Este (hoy, de La Almudena)

 

Emilio Sanchís Celda

Era ferroviario afiliado a UGT al estallido de la guerra y se alistó voluntario en las Milicias Populares, llegando al grado de mayor de milicias con el Ejército Popular. Sirvió en la 108 Brigada Mixta que se creó en el Ejército del Este pero que acudió a la batalla de Brunete, quedando ya definitivamente en el Ejército del Centro en el I cuerpo. Durante el golpe de Casado la brigada se mostró neutral, aunque su comandante Francisco Alifa Melenchón fue sustituido por Emilio Sánchis Celda. Detenido por los franquistas fue condenado a muerte por tener denuncias derechistas en su contra. La pena fue conmutada a 30 años y posteriormente a 20 años. Salió en libertad vigilada en 1945

 Julia Sanz López.

Miliciana del 14 Bon. de Voluntarios y que por su valentía fue condecorada por el Director General de Seguridad Manuel Muñoz, ascendiendo a cabo del cuerpo de Seguridad de la República. En la foto Manuel Muñoz condecorándola Junto al comandante Ricardo Burillo Stholle del Cuerpo de Seguridad y el compañero de Julia, el ex-cura Sarroca (1). Por este motivo Julia Sanz, también fue vilipendiada que si había sido la amante de fulano y la de mengano, pues como mayor de edad tenía amores con quien quería. A estas alturas de la modernidad en este país, que ridículas son todas las críticas falsamente morales contra las mujeres republicanas que despuntaban en la II República. Por cierto, a la izquierda de Julia, ¡Burillo! Ese sí que era una buena pieza.

(1) En los medios derechistas, el cura Sarroca, antiguo capellán castrense que servia en los Servicios Especiales (Inteligencia del Ejercito) ha sido vilipendiado hasta el ridículo. Que no era ningún santo, seguro, que le gustaba el vino y las mujeres (¡era cura!), también seguro, pero el resto no nos lo creemos pues están basado en las declaraciones de testigos de después de la guerra bien tramada por la policía para que incluso algún testigo afirmara que el presidente Azaña le visitaba en su casa (sí, hombre...). Parece cierto que la justicia republicana le investigó porque se quedaba con perras y joyas de sus detenidos. Un cura traidor ¡capellán! no podía obtener clemencia de los franquistas y fue fusilado.

Eusebio Sanz Asensio

Cenetista de la columna del Rosal, mandó la 70 Brigada en Guadalajara y posteriormente la 25 y la 22 Divisiones, después de haber actuado en el Norte.

Ricardo Sanz García

Militante de la CNT, actuó como jefe suplente de la columna Durruti en Aragón. Cuando Durruti fue muerto en Madrid en noviembre de 1936, Sanz ocupó su puesto en la capital y permaneció con la columna hasta el final de la guerra, mandándola cuando fue transformada en la 26 División. Después de la guerra, los franceses lo deportaron a África del norte, pero posteriormente regresó a Francia donde vivía en 1972

   

 

Nota aparecida en la lista Tinet sobre los Hermanos de Ricardo Sanz:

Eran tres hermanos Carlos, Eusebio y Ricardo. Carlos Sanz: Una de las cabezas de los batallones cenetistas del Centro. En Septiembre de 1936 sustituyo a Cayuela al mando del batallón Ferrer y en Octubre paso a ser delegado del mismo. Militarizadas las milicias, fue comisario del batallón Ferrer mandado por Cantos, comisario de la IV División mandada por Palacios y acabo la guerra como comisario de Cuerpo de ejercito. Eusebio Sanz: Mandó como comandante la brigada 70 (antigua columna Espartacus) de la división 14 de Mera. Durante el asedio madrileño dirigió los trenes blindados; se distinguió en el ataque de Pingarron y toma de Brihuega. En Septiembre  de 1938 mandaba la 22 División en el frente granadino. En Marzo de 1939 en Baza.

Cándido Saseta Echebarria.

Militar guipuzcoano, nacido en Hondarribia el 12 de diciembre de 1904. Del Instituto de San Sebastián pasó a los 15 años a la Academia Militar de Intendencia de Ávila. Al producirse el alzamiento militar de julio de 1936 era capitán de Intendencia de la guarnición de Vitoria. Fiel a la legalidad republicana, se sumó a la columna que, al mando de Pérez Garmendia, partió hacia Vitoria. Nombrado jefe militar de la Comandancia de Azpeitia, intervino activamente en la creación del "Euzko-Gudarostea" o ejército vasco. Al frente de sus gudaris peleó con bravura, pero en inferioridad de condiciones, en la retirada republicana a través de Guipúzcoa. Fue uno de los creadores de la línea que, desde Lekeitio hasta Otxandio, logró frenar el avance de las brigadas nacionales. En enero de 1937 fue nombrado Comandante de "Euzko-Gudarostea". En febrero de este año fue enviado al frente de Asturias como jefe de la expedición vasca. En este frente, en la localidad de Areces (Trubia), había de encontrar la muerte el 23 de febrero cuando atacaba con sus gudaris una posición enemiga. Además del jefe inteligente y entusiasta, fue hombre de extraordinario valor personal. Uno de los batallones nacionalistas vascos llevó su nombre.

Fuente: Página de la Enciclopedia Auñamendi (Información enviada por Felipe Peña, imagen enviada por un colaborador)

Antonio Sastre Molina

Canario (Tenerife) que ingresó en la academia de Infantería en 1919 con 17 años. Tras un periodo destinado en Las Palmas, en 1923 parte para África donde permanece hasta 1927 regresando a su fin a Las Palmas. En 1929 pide pasar a la reserva, probablemente porque tenía ideas progresistas que contradecían la vida cotidiana de una guarnición militar. Aprobó unas oposiciones  a Interventor de la Administración Local. Ya civil se afilio a la Agrupación Socialista Arrecife-Lanzarote. En 1934 fue expulsado de la Administración  Local y no recuperó su empleo hasta el triunfo del Frente Popular en febrero de 1936. Al inicio de la guerra se unió a las Milicias Populares siendo al finales del año 236 nombrado jefe militar del sector de Alora. Tras la pérdida de todo corredor malagueño quedó estacionado en Almería donde se le encomendó la creación de la 51 Brigada Mixta con la que se trasladó como comandante al frente de Córdoba.  A principios de junio quedó disponible en Valencia probablemente de resultas del poco éxito de su brigada en Cerro Gordo, donde además la brigada sufrió muchas bajas. Tras un periodo de instructor en un CRIM le fue entregado el mando de la 216 Brigada Mixta del XX Cuerpo. En julio de 1938 en plena ofensiva franquista del frente de Levante entró en conflicto con sus superiores al respecto de órdenes que consideraba inadecuados para el estado de su unidad, desmoralizada, falta de armas y con agotamiento físico. Fue destituido fulminantemente y destacamos que fue el mayor Sastre el que dio la cara por su unidad tuviera militarmente razón o no siendo enviado al frente de Extremadura mientras se instruía su expediente. La justicia militar republicana le ingresó en prisión (Monteolivete, Valencia) A finales de marzo de 1929 fue liberado para evitar que cayera en manos franquistas en la propia prisión sabiendo quien lo libero que había sido militar profesional y que en su vida civil había tenido también serios conflictos políticos. Buscando una oportunidad, Sastre partió como muchos otros a Alicante donde fue detenido finalmente por los franquistas. Procesado y condenado a 20 años tuvo mucha suerte y le fue conmutada la pena a seis años al cabo de tiempo, el cual lo paso con cierto turismo carcelario quedando en la prisión provincial de las Palmas de donde salio con la condicional en el verano de 1941. ES un caso, bastante corriente de militar profesional encarcelado en ambas zonas.

Juan Sayós Estivill

Nació en Sant Quirze de Besora, Barcelona el 25-09-1916. Ingresó en aviación en diciembre de 1936. Realizó el curso de piloto en Francia (Boissy Le Châtelle) y a su regreso en junio de 1.937 pasó las pruebas de selección para el curso de caza en La Ribera. En agosto logró el título de piloto de caza, pero fue destinado como profesor auxiliar de vuelo en la escuela de La Rivera. El 4 de enero de 1.938 fue asignado al cuadro eventual de Celdrá, Gerona, de allí sale al poco tiempo para la 1ª Escuadrilla de Chatos con pilotos rusos y con sólo un par de españoles. En esta unidad combatió durante casi toda la guerra. Fue herido el 25 de enero de 1938 al capotar su avión en un aterrizaje forzoso. Fue derribado el 08.03.38 saltando en paracaídas. Queriendo pasar a los Moscas I-16, volvió a Murcia, a la Escuela de Alta Velocidad de El Carmolí, en septiembre de 1938, terminando la guerra en la 1ª Escuadrilla de Moscas a la que se incorpora en octubre del mismo año. Fue derribado el 12 de noviembre, pero aunque salta en paracaídas resultó gravemente herido. Fue evacuado a Francia convaleciente de sus heridas siendo internado en el campo de refugiados de Argelés sur Mer y mas tarde en el de Gur. En 1.971 publicó el libro Un aviador de la República bajo el seudónimo Joan Milany. Ascendió a sargento el 24.08.37 (DO 212 del 03.09.37) y a teniente el 30.03.38 (DO 131 del 31.05.38).

 

El 13-08-2013 nos escribió Jesus B. para decirnos:

He podido observar una pequeña errata tanto en el nombre como en el lugar de nacimiento de mi paisano, el piloto Juan Sayós Estivill.

El nombre correcto es pues Juan Sayós Estivill y el lugar de nacimiento Sant Quirze de Besora (Población que recibió el nombre de "Bisaura de Ter" durante la Guerra)

En esta pagina de la Vanguardia encontrarán una reseña de varios de los pilotos de los que se habla en  la pagina de reseña del personal de la Fuerza Aérea :

http://hemeroteca.lavanguardia.com/previewPdf.html?id=33126425

Así mismo me permito incluir unos párrafos de su libro publicado en 1999 en el que cuenta las circunstancias de su paso de la frontera francesa.

Joan de Milany, Un aviador de la república (1999).

“En enero de 1939, el peligro convergía alrededor de la ciudad de Barcelona y los heridos de la aviación fuimos trasladados a Banyoles. A los que ya podíamos movernos por nuestro propio pie se nos alojó en una fonda cuyos propietarios no ocultaban apenas la repulsión que les inspirábamos. Fue un corto relevo antes de instalarnos en una finca situada sobre el pueblo de Vilallonga de Ter, cerca de Camprodon y junto a la frontera. Era la etapa preparatoria del exilio.

En el transcurso de estos traslados, cierto número de médicos, enfermeros y demás personal sanitario que en Barcelona sobraba para cuidarnos, había desaparecido y en Vilallonga de Ter sólo quedaban los dispuestos a cruzar con nosotros la frontera cosa que, desde el momento en que Barcelona se rindió a las fuerzas enemigas, debía realizarse inevitablemente al cabo de muy pocos días. La única incógnita era el lugar al que finalmente nos dirigiríamos, pero circulaban rumores de que sería a algún país de América. La posibilidad de que la zona central republicana, prácticamente bloqueada, pudiera sostenerse durante largo tiempo era tan utópica, que sólo podían acariciarla los visionarios.

Caídos ya Vic y Gerona, la inmensa avalancha de personas que, por uno u otro motivo, temían la represión de los franquistas,  llegó a la frontera francesa, la cual, al principio, nuestros vecinos pretendían mantener cerrada, pero aquella masa de seres desesperados y acostumbrados a la guerra era tan imponente que optaron por disfrazar de piedad lo que posiblemente era prudencia.

Empezó la emigración general y por lo que a nosotros respecta, el día cinco de febrero todo el personal hospitalizado en Vilallonga, junto con los sanitarios, fue trasladado en camiones y ambulancias hasta el propio Coll d'Ares, lugar donde terminaba la carretera de Molló para convertirse en estrecha pista de montaña.

Puesto que venían otros vehículos detrás y era preciso dejar sitio, a medida que los coches se iban vaciando, los chóferes los lanzaban a un barranco inmediato. Había algunos vestigios de nieve, pero brillaba el sol y el frío no era excesivo para tratarse de aquel lugar. Algunos gendarmes, situados en la línea fronteriza, vigilaban que nadie entrase en Francia armado”.

Muchas gracias.

Salud y República.

Alfredo Semprún Ramos

Comandante leal de la Guardia Civil en la comandancia de Madrid. Mandó en sus inicios la 124 brigada mixta. Enviado a Asturias y ascendido a teniente coronel mandó la  3 División (después 61 División) del III Cuerpo de Ejército del Ejercito Republicano en Asturias. El SIM lo procesó a su regreso a Barcelona tras salir de Gijón, aunque ignoramos el motivo. Fue integrado en el Cuerpo de Seguridad en enero de 1938. Fue evacuado a Francia con la salud muy deteriorada y como había sido condecorado por los franceses por su condición de aliadófilo durante la Gran Guerra fue bien tratado y evitó el campo de concentración lo que no fue óbice para que muriera al poco tiempo de resultas de su mala salud.

Javier Semprún desde Barcelona nos escribe para decirnos:

Hola. Sobre el Teniente Coronel de la Guardia Civil: Alfredo Semprún  Ramos puedo informaros de que era gentilhombre de palacio con Alfonso XIII (Hemeroteca de la Vanguardia, sale su nombramiento), e impulsor del Parque Móvil de la Guardia Civil, para facilitar las escoltas al  Rey (Creo que hay referencias en la Historia de la Guardia Civil publicada hace 25 años). Fue condecorado en 1934 por su actuación en  Logroño (Hemeroteca del ABC) cuando el levantamiento, y en julio del 36 permaneció fiel al orden establecido. Tras una breve detención en  Madrid, comprobada su no implicación en el golpe, se desplazó al  frente de Somosierra, como comandante de la Guardia Civil. Aparece  después en el frente de Huesca, ya como teniente coronel de la  Guardia Nacional Republicana, y se incorpora al frente de Oviedo en el empleo que recogéis. Cuando cae el frente, escapa en el Toñín,  la  peripecia del barco está publicada, y una vez en Francia, regresa a Barcelona, para seguir luchando por la República donde es procesado por el SIM y encarcelado. Se exilia a Francia. Tenía en su poder la Legión de Honor de la República Francesa, por su posición al lado de los aliados durante la  Gran Guerra, y gracias a ella, una vez en Francia esquiva el campo de concentración y le es concedida casa y pensión en Perpignan, donde muere a los pocos meses, a causa de las lesiones irrecuperables  sufridas en su cautiverio en Barcelona.

Francisco Serra Castells

Coronel de Artillería, jefe del Regimiento de Montaña nº 1, de guarnición en Barcelona que el 18 de julio sabía que la mayor parte de su oficialidad se iba a unir a la rebelión; de ahí que se ausente del cuartel en la noche del 18 de julio, para no ser convertido en rehén o liquidado. El 19 se presenta en la unidad y no acepta la supuesta orden de Goded de que salga con sus fuerzas para reducir la Consejería de Gobernación. No obstante, fue detenido y juzgado, pero, por sus antecedentes y actuación, fue absuelto y su liberación constituyó un triunfo popular. Al final de la guerra fue procesado por los rebeldes pero consiguió ser absuelto.

Ciriaco Sidrach de Cardona del Toro

Teniente retirado que vivía en Murcia de simpatías socialistas. Se le incorporó al Ejército popular. Ascendido a comandante de infantería, mandaba al final de la guerra un batallón en la 7 Brigada Mixta. Con la asonada de Casado, fue nombrado para el mando de la brigada.  Tras la guerra fue detenido en 1943, encarcelado y salió con la condicional al año siguiente. Militaba en PSOE. Murió en marzo de 1987.

Carlos Soto Romero

Teniente de navío que al iniciarse la guerra civil se encontraba al mando del torpedero 17 atracado en Barcelona. Con la rebelión, Aranguren, general de la Guardia Civil leal, ordenó al Capitán Bayo que enviara al teniente de navío Soto y su torpedero a Palma de Mallorca como parlamentario del Gobierno de la Generalidad de Cataluña, para tratar de la rendición de los sublevados. Esto le costó la vida a Soto, pues los rebeldes lo detuvieron y le juzgaron en Consejo de Guerra sumarísimo según su bando de guerra y los fusilaron en el Fuerte de San Carlos.

Xavier Lacosta nos cuenta en su artículo:

"Ese mismo día 21, un emisario de la legalidad republicana desembarcó también en el Port de Pollença procedente de Barcelona –había hecho la travesía en el torpedero nº 17- para instar la rendición de los alzados y evitar así un derramamiento de sangre. Se trataba del teniente de navío Carlos Soto Romero y obraba bajo órdenes directas del general Aranguren, leal al Gobierno. Exhibió bandera blanca y se dirigió hacia la base de hidroaviones –aún en servicio- del mismo puerto. El mando militar de la base le consiguió un coche de alquiler, conducido por el joven Macià Plomer, para cubrir los cerca de 60 kilómetros hasta la capital.

Un control detuvo el vehículo a la altura de Inca, en manos de los sublevados como toda Mallorca, pero, tras comunicar con la autoridad de Palma, le dejaron continuar viaje. En la capital se entrevistó con el sustituto de Goded, el coronel Aurelio Díaz Freijoó para que se sometiera a la autoridad gubernamental, con resultado infructuoso. Los rebeldes querían salirse con la suya. Carlos Soto dio por concluida su gestión y, en la creencia que le amparaba su condición de emisario de la legalidad, se dispuso a regresar a Pollensa y a Barcelona para notificar a sus superiores el resultado de la entrevista. Pero no le dejaron: en la puerta del mismo despacho de Díaz Freijoó le esperaba un grupo de militares y falangistas con Alfonso de Zayas a la cabeza, que le detuvo.

Al saber todo esto, Franco montó en cólera. Telegrafió a Baleares, tildando al torpedero leal a la República de ‘barco pirata’ y ordenando el juicio sumarísimo del teniente de navío detenido."

 

Julián Suárez Inclán.

Era capitán de Estado Mayor al inicio de la guerra, y destinado en imprentas militares. Recibió órdenes de incorporarse al Ejército Popular, donde sirvió en el Servicio de Topografía como comandante. Era agente del SIPM franquista y su causa fue sobreseída, quedando sin cargos.

José Suárez Montero.

Era Guardia de asalto y se incorporó voluntario a las Milicias Populares. Alcanzó el grado de mayor de milicias mandando la 30 Brigada Mixta. Tras participar en la ofensiva de la Granja, su comandante, Tagüeña ascendió al mando de una división, y José Suárez tomo el mando de la brigada. Al final de la guerra, Suárez mandaba la 2 División. Su filiación al PCE, provocó su detención por Casado, y los franquistas se lo encontraron detenido. Fue encausado en grupo de los 17 comunistas del "Expediente de la Junta de Casado" y fusilado el tres de julio de 1941.

 

 

 

 

Luis Suárez López

Periodista sevillano nacido en 1918. En 1936 se inició en la profesión en "Liberal" que compaginó con trabajos en radio Sevilla. Como universitario era cuadro dirigente de la Federación Universitaria Escolar y miembro de las Juventudes Socialistas sevillanas. Participó en el proceso de unificación de las Juventudes Socialistas a las JSU pasando a ser cuadro directivo de la nueva organización. Con el golpe militar se escapó a Madrid y rápidamente se incorporó a las unidades de milicianos de la capital. Formando parte de batallón Octubre nº 1 del que pasó a la 68 brigada mixta con la que combatió en todos los frentes con el grado de capitán con veinte años. Se exilió a Francia con el Ejército del Este en la 34 división. Tras un periodo en distintos campos franceses, el 24 de mayo de 1939 embarcó en el Sinaia rumbo a Méjico. Desde Veracruz partió para Méjico DF donde renovó su profesión de periodista en distintas revistas y diarios. También fue presentador de TV con programa propio. Además fue reportero en la guerra de Vietnam, Afganistán, la revolución dominicana, Cuba, Haiti y Nicaragua. Durante todo su exilio publicó decenas de libros referentes a sus actividades periodísticas como periodista de guerra. En 2003 falleció a los 85 años.

 

Leopoldo Sur Gómez.

Maestro nacional, de 23 años militante de las FUE antes de la guerra, que se alistó voluntario a las Milicias Populares proveniente de las JSU. Sirvió en la 34 Brigada Mixta que cubría un frente tranquilo. En agosto de 1938 le fue encomendado el mando de la brigada. Fue destituido por Casado que no confiaba en él. Los franquistas le encausaron con la grave acusación de haber castigado duramente a soldados republicanos desertores. Los tribunales militares franquistas tenían severas instrucciones al respecto de fusilamientos de desertores, lo que consideraban como crímenes (excepto cuando lo hacían ellos). Fue condenado a muerte y fusilado en junio de 1941 en Alcalá de Henares.

Manuel Tagüeña Lacorte

Matemático y físico, había militado en la Federación Universitaria Escolar (FUE, sindicato estudiantil de izquierdas). Después de haber tomado parte en los primeros combates madrileños, fue ayudante y más tarde comandante del batallón Octubre nº II. Mandó después la 30 Brigada y, en 1937, la 3 División. En 1938 fue trasladado al frente de Valencia y, pasando a la orilla izquierda del Ebro, fue nombrado jefe del XV Cuerpo del Ejército del Ebro, a la edad de 25 años. Dirigió ese Cuerpo durante la batalla del Ebro y durante su retirada hasta Francia. Regresado a España, no se le confiaron puestos de mando y marchó a la URSS. Rompió con el comunismo soviético a raíz de la querella con Tito en 1948 y, tras pasar algún tiempo en Checoslovaquia donde completó su educación científica, marchó a México, donde trabajó en unos laboratorios médicos hasta su fallecimiento en 1971. Escribió una autobiografía: "Testimonio de dos guerras". Su esposa, Carmen Parga, también escribió sus memorias: "Antes que sea tarde", publicado en 1996. Carmen y Manuel se habían conocido en sus tiempos de la FUE en la universidad. Es uno de los grandes personajes de la Guerra Civil española, hay pocas reseñas que mencionen aspectos negativos de este personaje.

Fuente: Mientras que escribimos nuestra reseña, ofrecemos la de Michael Alpert.

 

Francisco Tarazona Torán (1915-1989)

Uno de los grandes de la aviación de caza republicana. Su padre era un arquitecto de vanguardia que triunfo en la Exposición Universal de París de 1900 contuyendo junto con sus hermanos el Pabellón español. La fama le ayudo a encontrar trabajo en Méjico donde la familia estuvo casi veinte años y donde nació Francisco, el menor de doce, sí, doce hijos. Eran otros tiempos. El caso es que la familia regresó a Valencia de donde era originaria. No sabemos que estudió el chiquet pero el caso es que en julio de 1936 tenía 21 años, la mejor edad de la vida, sólo que a esa edad no lo sabes. Francisco se dirige prontamente a la base de Los Alcázares y se alista voluntario. Tampoco sabemos si sirvió de ayudante, de mecánico o de navegante, o quizá de piloto temprano de la Republica, que alguno hubo. Pero en septiembre de 1936 fue seleccionado para la primera expedición para la URSS de alumnos españoles para la aviación de caza. En junio de 1937 regresa a España, es sargento y es destinado al Norte con una escuadrilla de I-16 Moscas. Allí derriba dos aparatos enemigos (uno de ellos un Bf-109) pero en octubre de 1937 luchando por lo poco que le queda a la República en el Norte es derribado él mismo y cae malamente en un bosque en zona enemiga pero consigue regresar y es evacuado en avión a Francia y luego a España recuperándose en la casa de reposo de La Malvarrosa, que para un valenciano es lo más. Recuperado a inicios de 1938 sigue un curso de alta velocidad en El Carmoli y es destinado a la Primera Escuadrilla de Moscas (la famosa Escuadra 11) en Caspe pero en abril de 1938, Caspe ha caido y es enviado a la Tercera Escuadrilla de Moscas que manda José María Bravo ascendiendo de jefe de patrulla a subjefe de la Escuadrilla, las campañas las de la ofensiva franquista contra Valencia y la batalla del Ebro. Ascendido Bravo es nombrado jefe de la Tercera Escuadrilla y ascendido a teniente. Salvó la vida de milagro al intentar despegar del aeropuerto de Vilajuiga bajo fuego enemigo, Ya en Francia le ingresaron en el campo de Argeles sur Mer, pero consiguió contactar con la embajada Mejicana y alegó haber nacido en Méjico con lo cual fue rescatado y embarcado para Méjico donde ya se había exiliado su familia. Allí trabajo de piloto comercial con gran éxito. Escribió libros sobre la guerra y estaba muy bien considerado en los medios aeronáuticos mejicanos. Su libro Sangre en el cielo (1) fue escrito de memoria y contiene muchos errores y poca verosimilitud. Por otro lado se sabe que Tarazona fue el que se inventó con otros amigo piloto exiliado lo de Fuerzas Aéreas de la República Española (FARE), cosa que no se ve en ningún oficio, parte o documento de la aviación Republicana, pero que tanto gusta a los aficionados. Lo correcto es Fuerzas Aéreas o del Aire o Servicio de Aviación al inicio de la Guerra. (2) En 1974 Tarazona, ya mayor escribió un sorprendente libro, "El despertar de las águilas" donde se presenta como simpatizante comunista y de la revolución cubana. Murió en Méjico capital en 1989 y tenía en su haber mas de una docena de derribos propios más otros compartidos.

 

(1) "Yo fui piloto de caza rojo" como lo tituló la editorial derechista San Martín que no daba puntada sin hilo, ya saben al estilo de los libros patrocinados por el OSS y luego la CIA, Yo fui ministro de Stalin, yo fui... Un titulo que parecía pedir perdon y arrepentimiento. Todo lo contrario Tarazona estaba muy orgulloso de su historial y Jose María Bravo, no digamos...

(2)  Lo mismo pasa con esas siglas EPR para denominar al Ejercito Popular. La documentación oficial es Ministerio de Defensa - Ejercito de Tierra, o Ejercito Regular que se ve en algunas banderas para diferenciarse del Ejercito de Milicianos. Los militares profesionales, sirvieran a gusto o a disgusto preferían Ejercito Regular. Y finalmente su verdadero nombre Ejercito Popular. En cuanto a la Marina de Guerra Republicana lo correcto es Fuerzas Navales del Cantábrico o del Mediterráneo, esta última fuerza se señala a veces simplemente como Flota.

 Antonio Tellado Vázquez

Militante de las, Juventudes Socialistas desde 1934, de] Partido Socialista Obrero Español (1936) y de la UGT. Teniente de Milicias, Fundador del Regimiento "El Socialista" y de la Federación de Trabajadores de la Tierra. Teniente de Carabineros según Orden del Ministerio de la Guerra aparecida en el Boletín Oficial del Estado el día 13-11-37. Destinado a la 65 Brigada Mixta de Carabineros en el Frente del Jarama. Herido en combate el 16 de noviembre, de 1938, con pérdida de la mano izquierda. Capitán de Carabineros. Exilado en Francia. Miembro de la Resistencia Francesa de SFIO, en el grupo -LibeNort-. Detenido por la Gestapo y deportado. Miembro del Comité Ejecutivo de la Comisión Reorganizadora de la Liga de Mutilados de la Guerra de España, y elegido Miembro de la Comisión Ejecutiva en al Congreso de Mutilados, celebrado en Toulouse en 1945. Miembro de la Comisión Ejecutiva de la Región de París del PSU. Delegación Sindical de la CFDT.

 

Nota: Tellado, junto con A.A. Bravo, escribió varios libros, en uno de ellos, "El peso de la derrota", se muestra muy duro y muy injusto con las autoridades de la República del gobierno Negrín, valoración que en absoluto compartimos.

Dionisio Tellado Vázquez.

Quizá hermano del anterior. Era maestro nacional que se alistó voluntario en el cuerpo de Carabineros, sirviendo como capitán el Estado mayor de la 69 División, donde siempre sirvieron la 99 y la 108 Brigada Mixtas. La división no se opuso a Casado, y la 99 Brigada bajó a Madrid en su ayuda. Los franquistas lo tuvieron en prisión hasta 1940, donde salió con la causa sobreseída.

Felix Toquero Burillo

En Noviembre del 36 ingresa en el Batallón de Auto-Transportes, 2ª Compañía en Madrid En Diciembre del 36 se traslada a La Ribera para realizar el curso de piloto, permaneciendo allí hasta su salida para Rusia con la Primera Promoción para realizar el curso de Caza en Febrero del 37. Regresa a España a Los Alcázares y marcha como voluntario al Norte en Agosto del 37. El 18 de Octubre de ese mismo año es derribado en combate, es herido y salta en paracaídas. Evacuado en un barco inglés desde Gijón. En Diciembre del 37 se reincorpora a la 1ª Escuadrilla del grupo 21 que mandaba el Teniente Eduardo Claudín. En Marzo del 38 es destinado a la 5ª Escuadrilla al regreso de un permiso. En Abril del 38 le destinan a la 3ª Escuadrilla. El 18 de Julio de ese mismo año, volando con José Mª Bravo derriba un Fiat. El día 1 de Agosto, al sacar el tren de aterrizaje del Mosca se le "escapa" y le rompe el dedo pulgar de la mano derecha. En Octubre del 38 hace reentrenamiento en El Carmolí. En Diciembre del 39 es destinado como profesor de vuelo en la Escuela de Alta Velocidad de El Carmolí, permaneciendo allí hasta el final de la Guerra. Ascendido a Sargento el 30-04-37 y a Teniente por Méritos en campaña el 01-09-38. Permaneció detenido en Castillo de Galeras hasta el Consejo de Guerra el 11 de Septiembre del 39 donde fue juzgado por un delito de "Adhesión a la rebelión" y donde el Fiscal solicitó una pena de 30 años y un día de reclusión mayor. Fue condenado a 12 años de reclusión menor y destierro. La pena le fue conmutada por seis años de prisión mayor. En 1949 se marchó a vivir a Venezuela, donde falleció en 1954.

Pulse aquí para ver una imagen de los Alcázares gentilmente cedida por Julio Toquero Flores

Felix Toquero es el primero de la izquierda de la primera fila de los cinco que están sentados. El primero de la derecha es Francisco Tarazona. La imagen fue tomada el 9 de julio de 1937.) Todas las fuentes son de: Julio Toquero Flores (08/08/20004)

Nilamón Toral Azcona (1908-1983)

Joven boxeador retirado y profesor de boxeo que estaba haciendo el servicio militar como cabo en Madrid en el Regimiento de Ferrocarriles. Era un industrial con una pequeña fortuna. Había nacido en Dosbarrios, Toledo, y era desde joven miembro de las Juventudes Socialistas. Al estallido de la guerra se unió a las Miilicias Populares y bien pronto se encuentra luchando en Somosierra y nombrado teniente por los hombres de su columna que era la que mandaba el comandante Perea. Tras variadas acciones en el frente madrileño en las que fue herido en dos ocasiones fue ascendido a capitán de milicias por sus méritos. Con la militarización su columna pasó a ser la 32 Brigada Mixta donde tras mandar un batallón fue nombrado mayor y comandante de la unidad con la que participó en la sangrienta batalla de Brunete. Para el mes siguiente la brigada fue traslada al frente de Aragón para la ofensiva de verano de Belchite donde la brigada encuadrada en la 35 división internacional se distinguió sobremanera. Toral fue el primer mando republicano en entrar en Belchite. Reconocidos sus méritos se le dio el mando de la novísima 70 división. Para finales de año, tras la reorganización que hizo Vicente Rojo del Ejercito Popular, otra vez en línea en la batalla del cerco de Teruel. En concreto la 32 y la división también se comportaron como se esperaba de unidades tan fogueadas y veteranas, si bien el resultado de la batalla fue desfavorable para la República. La ofensiva de marzo de los franquistas en Aragón fue muy dura para el Ejercito de Maniobra completamente desgastado, muy mal armado y con baja moral, no obstante las fuerzas de Toral resistieron duramente y se retiraron para no quedar copadas. La lucha fue tan encarnizada que la 32 brigada fue propuesta para la Placa Laureada de Madrid. Toral recibió el mando, además de su división, la 70, una creada por el Ejercito de Extremadura y enviada de urgencia al Levante para intentar detener la ofensiva franquista, era llamada la unidad precisamente División Extremadura, y con ello se formaría la Agrupación Toral (un Cuerpo en realidad) y en mayo de 1938 es ascendido a teniente coronel y enviado al frente de Extremadura junto con las dos divisiones. Allí volvió a constituirse un grupo de combate al mando de Toral, también con el mismo nombre pero con otras divisiones y participó en la batalla de Peñarroya (Valsequillo) donde Toral volvió a demostrar su solidez militar (1). Al fin de la guerra, Toral se dirigió a Alicante, como hicieron la mayoría de los mandos del Ejercito de Extremadura. Allí fue detenido e internado con otros muchos en el triste campo de Albatera. En su primer proceso fur condenado a perpetua pero salió con la condicional en 1944. Toral era un hombre bueno, leal y consciente y tras un tiempo con su familia acepto la propuesta del PCE de encabezar la guerrilla en la zona de Córdoba, lo que era una temeridad y no sed sabe que le dijo el partido para obedecer tal orden después de tantas vicistudes personales. Quizá Toral se limitó a obedecer. Pero la policía franquista andaba siguiéndole la pista y fue detenido en 1945 y condenado a muerte pena que consiguió evitar gracias a la intervención de amigos y familiares consiguiendo avales. De cualquier modo, Toral fue uno de los presos comunistas que mas años de cárcel acumuló, 19 años. Eso minó su salud, él que era un hombre muy fuerte. Pero así eran los jueces franquistas te perdonaban la condena de a muerte pues ya caerás en los penales siberianos. Cuando salió definitivamente de la cárcel, como muchos otros presos de larga duración su salud estaba quebrada pero su moral no. Como le habían expoliado dejándole sin un duro se fue a vivir con sus suegros poniéndose a trabajar en una empresa constructora, probablemente de oficinista, él, que había manejado un Cuerpo de Ejercito. Con los años fundo una asociación de camaraderia de excombatientes republicanos (Unex) algo no iba a permitir Franco y que hacía mucha falta. Finalmente murió en el Hospital Clínico de Madrid en 1983. Uno de los grandes del Ejercito Popular.

(1) Toral era de ese tipo de oficiales de milicias comunistas, civiles de clase media, con instrucción y con inteligencia, como él mismo, Tagüeña, Merino, Artemio Precioso, etc... pero a los que la política militar del PCE dejaba a un poco de lado porque tenían otros líderes de milicias que provenían de las clases más populares muy al gusto de Diaz e Ibarruri y que hacían buena política para el partido, como Modesto, Lister y la larga lista de feroces comisarios comunistas... En cualquier caso, todo el mundo sabía en las alturas del Ejército de Tierra, desde el Estado Mayor de Rojo a la Subsecretaria de Antonio Cordón, que a Nilamón Toral se le podía mandar cualquier cosa, como al soldado de porcelana y músico, Gustavo Durán, y al profesor Manuel Tagüeña, todos comunistas recientes. Y también se sabía que si querías que las Grandes Unidades de influencia comunista funcionaran correctamente había que nombrar a Modesto su comandante, y otra que se sabía era que a Lister no le podías quitar su 11 división y su V Cuerpo por mucho que a veces hiciera lo que le daba la gana obviando las órdenes de militares profesionales de alto rango a los que Lister despreciaba. Un sentimiento mutuo que Sebastián Pozas, Hernández Saravia, Leopoldo Menéndez y otros profesionales no disimulaban en absoluto y que se sustanció violentamente con el golpe del coronel Casado (la semana del duro)

Adolfo Torrado Atocha

Coronel de Artillería Natural de La Coruña y destinado en esta ciudad en el 16 Regimiento de Artillería Ligera, se mantuvo leal al gobierno y fue encausado junto con los generales Salcedo Molinuevo y Caridad Pita, quienes fueron condenados a muerte y fusilados. Torrado fue condenado a reclusión perpetua. (1)

Fuente: Marcelino Laruelo Roa.

 (1) Antonio Cordón en su libro "Trayectoria", lo nombra como Alfonso, lo alaba como militar y afirma que fue fusilado. Hay relatores en la red que afirmaban este fusilamiento pero parece que está confirmada la pena de perpetua.

Ramón Torres

Famoso aviador catalán que había recibido innumerables premios y realizado hazañas aeronáuticas. Fue el primer aviador español que cruzó el Sahara. Al inicio de la guerra sirvió en las incipientes fuerzas aéreas republicanas como piloto de transporte. Posteriormente pasó a un grupo de bombardeo (el 72 de defensa de costas, probablemente) donde se encontraba entre otros, el único aparato de la casa Breguet el particular B-460 Vultur. En una de sus misiones recibió fuego antiaéreo del crucero pesado Canarias que dañando el aparato y obligando al capitán Torres a buscar un lugar apropiado para un aterrizaje forzoso. Todo fue inútil, el aparato se estrello cerca del mar y murió toda la tripulación.

 

Manuel Uribarri Barutell

Capitán de la Guardia civil destinado a Valencia, jugó un importante papel en la organización de las Milicias. Mandó la columna Fantasma en Extremadura y la 46 Brigada. Después de haber sido el jefe de E.M. de Extremadura dirigió un grupo guerrillero y posteriormente fue nombrado al frente del SIM. Fue destituido y marchó a Francia y posteriormente a Cuba, escribiendo varios libros en los que disculpa su actuación.

 

 


Reseña de Cristóbal Zaragoza:

Este capitán de la Guardia Civil estaba muy politizado. Destacado miembro de PSOE antes del levantamiento, alcanzó gran prestigio en el Partido como organizador y asesor militar de sus Milicias. El 18 de julio era jefe regional en Valencia de dicha organización paramilitar. Junto al gobernador civil, Claudio Solsona, fue él quien actuó de forma decidida armando a los milicianos que asaltaron los pocos cuarteles que todavía no se habían decidido abiertamente; la orden fue dada por el ministro de la Guerra, general Castelló, al general Martínez Monge. Uribarri dirigió personalmente las columnas formadas a tal efecto. Intervino en la expedición a Mallorca, al mando del capitán Bayo, con una columna que se había organizado en Valencia y que tenía que embarcar en el Mar Cantábrico, protegido por el destructor Almirante Antequera. Su acción en la conquista de Ibiza fue sin duda positiva, pero no hubo acuerdo entre él y Bayo llegado el momento de desembarcar en Mallorca, y Uribarri volvió a Valencia con sus buques y su columna. En los frentes del Tajo y Guadiana tuvo bajo sus órdenes a la famosa "Columna Fantasma"; según se desprende de los partes de guerra y de los informes del Estado Mayor, la conducta de Uribarri dejó mucho que desear durante el desarrollo de las operaciones.  En el verano de 1937, en la zona occidental de Guadarrama, mandó la recién creada 105 brigada mixta, a la que curiosamente también se la llamó "brigada fantasma". Dependía de la 3 división.

Manuel Uribeechevarría

Era teniente coronel de Artillería y en 1936 estaba retirado. Siguiendo obediencia debida se incorporó al Ejército Vasco y mandó una sección de su Estado Mayor.

Félix Urtubi Ercilla

Piloto de la caza republicana que había huido de la zona rebelde y que combatiendo en septiembre de 1936 en las cercanías de Madrid con un Nieuport 52  en lucha desigual contra Fiat Cr-32 italianos, chocó contra uno de ellos pereciendo, pero acabando también con el avión enemigo. El piloto italiano logró salvarse en paracaídas pero fue capturado e interrogado por Hidalgo de Cisneros, que comentó el lance a la prensa republicana.

 

Francisco Varela

Mayor de milicias que combatió en el batallón especial de la 11 División y luego mandó el batallón especial del V Cuerpo. Cayo defendiendo Borjas Blancas en 1938.

José Valcázar Crespo

Comandante de Artillería que al principio de la guerra servía en el Grupo de Artillería de Montaña en Oviedo. Al inicio de la guerra fue leal a la República y  en febrero de 1937 fue ascendido a teniente coronel. Fue ascendido a coronel en mayo de 1938 junto con otros militares artilleros y pocos días después fue destinado al IV Cuerpo como jefe de artillería. En septiembre de 1938 fue condecorado con la medalla del Valor. Detenido tras la guerra fue condenado a muerte y por suerte le fue conmutada por Perpetua saliendo en 1944 con la condicional.

Jesús Valdés Oroz

(Sangüesa 1896- Pamplona 1963) Capitán de Infantería desde 1922,  el 18 de julio de 1936 era jefe de la 21 Compañía de Asalto en Salamanca, con la que se traslada a Madrid, siguiendo las órdenes del Gobierno. Fundador de las Milicias Aragonesas, intervino en la Batalla de Guadalajara (1937) como Comandante jefe de la 72ª Brigada Mixta y en la defensa de la línea XYZ en la Campaña del Levante (1938). El 23 de febrero de 1939 fue nombrado Teniente Coronel de la 4ª División de Asalto. Condenado a pena de muerte en Consejo de Guerra (Zaragoza, 11 de enero de 1940), conmutada luego por reclusión perpetua, en 1947 fue indultado y separado definitivamente del ejército. En 2011 su familia consiguió que el Ministerio de Justicia lo rehabilitara de la ilegitima sentencia que recibió y de la cárcel que padeció.

 

 

Jacinto Vallejo Hinojosa.

Fue mayor de milicias y afiliado al PCE que trabajaba de albañil mosaista (baldosas) y que se alistó voluntario a las Milicias Populares al inicio del conflicto. Sabemos que sirvió en la 219 Brigada Mixta, que pertenecía a la 68 División del XX Cuerpo en el Ejército de Maniobra. La brigada participó muy brillantemente en la batalla de Teruel aunque quedó muy mermada. Fue reorganizada en la 66 División y posteriormente participó en la defensa de la línea X-Y-Z donde resistió tenazmente. En 1939, Vallejo Hinojosa tomó el mando de la brigada encuadrándose en la 73 división del XVII Cuerpo del Ejército de Extremadura participando en la ofensiva de Peñarroya. El Estado Mayor e incluso el mando de este ejército eran pro-casadistas, por lo que es probable que Vallejo Hinojosa que era militante del PCE, fuera despojado del mando y detenido. Los franquistas lo condenaron a muerte con la acusación de castigos sumarísimos a soldados republicanos desertores. Fue ejecutado en mayo de 1940 en las tapias del cementerio del Este. Parece que la Justicia Militar con su particular gracejo señoritingo tabernario, lo indulto una vez muerto.

 

Enrique Valls Poquet.

Era maestro nacional afiliado a FETE-UGT y al PSOE, que se alistó al cuerpo de Carabineros alcanzando el grado de mayor en un batallón de la 44 Brigada Mixta. La brigada se plantó frente a Casado y bajó del frente a Madrid, aunque Valls se mostraba más proclive a Casado. Terminada la lucha, Casado le nombro comandante de la brigada. Los franquistas le condenaron a 12 años y un día, saliendo en libertad en 1942.

 

Miguel Valverde Maldonado

Capitán de Infantería, Comandante del batallón Victoria del 5º Regimiento e incorporado a la 1 BM que por aquel entonces mandaba Líster. Fue muerto en el intento de capturar el Cerro de los Ángeles el 19 de Enero de 1937.

 

Josefina Vara Martínez.

A propósito de la imagen de la miliciana Josefina Vara, nos escribe Francisco Sardina Vara, para decirnos que la miliciana de la foto que preside nuestra web se llamaba Josefa Vara Martínez, que había nacido el 31 de julio de 1915 y que vivió en el barrio de Prosperidad, que se casó con el combatiente socialista Julio Sardina Marina y que tuvo tres hijos. Al terminó de la guerra fue apresada y condenada a muerte amenaza que tuvo que sufrir durante cuatro largos años en prisión en la cárcel de las Ventas de dónde finalmente pudo salir indultada. Su padre, Jesús Vara Areces murió combatiendo por la República en 1938. Josefa Vara murió el 23 de marzo de 1968.

José María Vázquez López

Era teniente de caballería en la escolta presidencial y conocía de entonces al comandante Segismundo Casado. Casado se lo llevó de ayudante y le ascendió a comandante. Vázquez tenía contactos con la Falange clandestina en Madrid. Su labor fue bastante importante en la conspiración de Casado. Pero tampoco le sirvió de mucho pues fue condenado a 30 años pese a tener avales de  militares profesionales derechistas y de civiles desafectos escondidos por Vázquez.  La pena le fue conmutada a seis años y un día, y salió en libertad condicional en 1941. La justicia militar era muy suya, a estos casos que finalmente serían condenados penas menores o indultados, primero les daba un susto para castigarles un poco por no haberse pasado al inicio de la guerra o peor por no estar muerto. Este comportamiento fue paradigmático de la Justicia Militar franquista.

 Etelvino Vega Martínez

De una familia de obreros metalúrgicos mierenses, Etelvino (un nombre muy asturiano) que era chapista se había afiliado al PCE en 1923 y fue nombrado Secretario General de la UJCE y enviado a Madrid para cuestiones organizativas. Próximo a Bullejos, Secretario General del PCE a la sazón, vivió la estupida política de la Komintern anterior a los Frentes Populares en sus propias carnes. Como Bullejo y sus camaradas discrepaban de esta línea pese a haberla protagonizado con ridículas manifestaciones en la Puerta del Sol en contra de la república burguesa la misma semana de la proclamación de la II República. Que ya hay que ser majadero. El caso es que en 1932 tras el IV Congreso del PCE y la sanjurjada donde la dirección del PCE defendió a la republica burguesa, ya muy cuestionados por los dirigentes de la corriente fiel a Moscú, pidieron cita a la Komintern con la intención de convencerla de que la política de "clase contra clase" del Comunismo Internacional era muy mala para el movimiento comunista y que donde más se evidenciaba era en la Alemania de la Republica de Weimar y en la España de la II República. Pero Moscú no tiene lagrimas para los caídos y Bullejo y sus camaradas ya estaban sentenciados y sus sucesores ya estaban avisados de que la delegación española iba a tardar un poco el volver (un autentico secuestro internacional) y que a la vuelta el partido cambiaría de gerentes. Como así fue. Pepe Diaz, Ibarruri y otros se hicieron con el mando y se echaron a las espaldas la irracional política internacional de Moscú hasta la llegada de la política de los Frentes Populares que parió Stalín cuando creyó que las democracias europeas le iban a apoyar contra la emergente Alemania nazi, cosa que nunca funcionó y que como sabemos obligó a Stalin al pacto contra natura con Alemania (pacto Ribbentrop-Molotov) Bullejo y los suyos fueron expulsados. Puede que a Etelvino sólo lo expulsaran de sus cargos y siguiera militando en la UJCE. El caso es que hay dos versiones de este periodo de 1934-1935 de la biografía de Etelvino: una, que se volvió con los largocaballeristas a las juventudes socialistas y se supone que en el 36 se paso a las JSU, y otra que dice que se dedico a las juventudes comunistas y que igualmente en el 36 se pasó a las JSU. Todas conducen a lo mismo. Al inicio de la guerra se enroló en las Milicias Populares y formo una columna de miembros locales de las MAOC que se integró en el 5º Regimiento y Etelvino la lideró pues tenía instrucción militar de cuando estuvo en Rusia. Cuando las JSU le llamaron para organizar los batallones llamados Octubre pocos días después, Etelvino colaboró en esta tarea con el Octubre nº 1. y con este batallón combatió en la Sierra y en el frente Sur de Madrid con el numero II, también se casó con una miliciana compañera del batallón y tuvo un hijo a inicios de 1937. Tras un par de mandos donde quedaba claro el despunte militar y el liderazgo de Etelvino, fue nombrado comandante de la 68 Brigada Mixta primero con la  4 división de Modesto permaneciendo de reserva en la batalla del Jarama y luego con la 35 de Walter donde participó en la Batalla de Brunete con buenos resultados. En plena batalla cedió el mando de la brigada a Francisco Romero Marín y pasó a mandar la 34 división donde quedó integrada la 68 brigada. Con esta división participó en el intento de cerco de Teruel diseñado por Vicente Rojo, primero con el XVIII Cuerpo y luego con el XXI. Tras esta terrible batalla la división se reorganizó y Etelvino fue enviado al mando del XII Cuerpo del Ejercito del Este y ascendido a teniente coronel con tres estrellas de mando en sus galones. La campaña de Cataluña le llevó a hasta la frontera y el exilio en el que su familia le acompañó. Pudo aún regresar en un avión junto con otros mandos del GERO (Cataluña) a la zona Centro-Sur (GERC). Negrín decidió nombrarle gobernador militar de Alicante para asegurar el puerto para caso de evacuación pero el golpe de casado puso patas arriba la poca estrategia de resistencia que le quedaba al gobierno legal. En este nombramiento no fue avalado por el PCE, que propuso a Galán, pero Negrín mando a Galán a la base de Cartagena y Etelvino partió para Alicante donde fue detenido y encarcelado la noche del 5 de marzo. Desesperado en prisión y sabiendo su destino si llegaban los franquistas, de nada sirvió que el  gobernador civil se apiadara de los presos comunistas detenidos por el trío Casado-Matallana-Menendez y los liberara, pues dio igual, se acercó al puerto pero no pudo embarcar y fue detenido los días siguientes e internado en Los Almendros luego de ser saqueado de todas sus pertenencias, no por falangistas ni carlistas ni italianos, las meras tropas de leva que los apresaron recibieron permiso tácito de sus oficiales para expoliar de todo lo valioso a los miles de detenidos en el puerto de Alicante. Así fue. De Los Almendros pasó al campo de Albatera para su reconocimiento y clasificación, como hacían los alemanes a los judíos a la llegada de Auschwitz. Con tanta gente la identificación positiva no era fácil y se ideo el método de invitar al campo como turismo delator a quienes tuvieran en su haber un buen rencor vengativo. Un militar rebelde vasco lo reconoció y este hecho lo aprovecharon los periodistas derechistas (ya no había otros) para publicar que se había detenido a un general comunista de la batalla del Ebro. Lo que seguro estimuló a los tribunales militares a empezar sus labores con sangre fresca. Visto y no visto, llevado al Correccional, fue procesado, juzgado, condenado a muerte y fusilado en noviembre de 1939 junto con todos los que componían el expediente, 26. La familia de Etelvino que se había exiliado con la retirada a Francia no regresó hasta la muerte de Franco. Tras muchos intentos consiguieron se le reconocieran a la viuda derechos pasivos.

Lea un apunte biográfico

Antonio Verardini Díaz-Ferreti

1.- Mera, 2.- Verardini. Algunos comentaristas de esta imagen afirman que el personaje de gafas en el centro en primer plano es el coronel Casado. Observe el lector, que Mera es el único que lleva alpargatas.

Mayor de milicias que fue Jefe del Estado Mayor de la columna del Rosal y que terminó de Jefe del Estado Mayor del IV Cuerpo de Ejercito junto a su comandante, el anarquista Cipriano Mera. Verardini compone un raro personaje que sirvió de voluntario en el Tercio y al que la vida y probablemente su inteligencia natural concienció lo suficiente para hacerse de izquierdas, pese a sus orígenes de clase media y a sus probables estudios de ingeniería en el ICAI de los jesuitas, gremio de pocos revolucionarios. Verardini se puso en contacto con miembros de la CNT mientras se encontraba en la cárcel Modelo por acusaciones que desconocemos, aunque varios relatores le acusan de estafador casi profesional. El caso es que tras la huelga general de la Construcción de Madrid, lanzada por la CNT y la UGT en la primavera de 1936 y de la que se descolgó la UGT, provocando airados enfrentamientos entre ambas sindicales, el gobierno, en verdaderos apuros con la derecha recalcitrante, y viendo que la huelga de la CNT añadía más leña al fuego, decidió encarcelar a algunos de sus dirigentes, entre los que se encontraba Mera. Algunos dicen que Verardini y Mera se conocieron en la cárcel, otros que fue después. Pero lo cierto es que iniciaron su andadura bélica en julio de 1936 con gran simpatía mutua. Cuenta Mera que a Verardini le hicieron jefe del Estado Mayor de la Columna de Rosal debido a que tenía instrucción técnica, conocimientos militares y, concretamente, dice Mera, sabía manejar los fusiles ametralladores de la columna.

Verardini se haría conocido durante la guerra por varios sucesos confusos entre los que destacaba su apoyo como confidente al grupo cenetista de los Servicios Especiales del Servicio de Inteligencia del Estado Mayor de la Guerra (Manuel Salgado), que a iniciativa del Comité de Defensa de la CNT (Eduardo Val)  y tras el asunto de la entrada policial al piso bajo protección de la legación de Finlandia y a su inspiración, decidieron a montar en diciembre de 1936 una falsa embajada de Siam en un chalet requisado por la CNT, con el propósito de apresar a los derechistas que querían pedir asilo en una embajada, salvar la vida y de paso combatir a la República desde la clandestinidad y la protección diplomática, como ya hacían varios cientos de asilados por las embajadas en Madrid de países derechistas, como Finlandia, Chile (1), Perú, y muchos otros que pese a despreciar a la II República, mantenían el tipo, asilando a perseguidos de toda laya, a la espera de la entrada de Franco. Se sabe de algunas embajadas, que pese a su carácter conservador, cobraban...

Esta continúa situación airaba a los madrileños que conocían los efectos de la Quinta Columna en sus propias carnes, indignaba a la prensa que clamaba contra la blandura gubernamental, y desquiciaba a los servicios de contraespionaje de distintos organismos republicanos. El problema era que las formas de trabajar de estos Servicios Especiales provocaban rechazo en autoridades y militares republicanos que no compartían esta forma de represión y que se habían sentido inseguros ellos y sus familias desde el inicio de la guerra. La retaguardia madrileña en el verano del 36 era tan peligrosa como el frente, y las vidas iban y venían de forma sangrienta cuando grupos que nada tenían que ver con la legítima represión gubernamental, aprovechaban para saquear, robar y matar con completa impunidad manchando el buen nombre de la República. De modo que la inicialmente legitimidad del gobierno en la captura de desafectos y quintacolumnistas fue pervertida por partidos, sindicatos y toda clase de oportunistas sin escrúpulos, entre los que posiblemente se encontraba este personaje.

Los Servicios Especiales de la CNT ya había protagonizado incidentes parecidos en el Estado Mayor de la Guerra y en su sucesor, el Estado Mayor del Ejército del Centro, y montó este servicio con dobles intenciones: capturar a derechistas que pretendían asilarse y de paso esquilmarlos. La iniciativa al parecer surgió del entorno de Verardini, concretamente su amigo y colaborador, Alfonso López de Letona (2), fue confirmada por Manuel Salgado y conocida por Eduardo Val (Comité de Defensa de la CNT). Uno de los implicados, un guardia de asalto, un tal Bonilla, tuvo una indiscreción que llegó a oídos del general  Miaja, quien montó en cólera y abortó el plan. Javier Cervera afirma en su excelente estudio sobre la retaguardia madrileña "La ciudad clandestina", que solo algunos militares desaparecieron, cuando tras dos días de actividad la falsa embajada se cerró. Y añade, que agentes derechistas ya infiltrados en el novísimo SIM (¡¡en diciembre de 1936!!) pudieron dar la voz de alarma a sus correligionarios. Por ello, no se sabe con certeza cuantos derechistas quedaron afectados. Lo que si se sabe es que Verardini hacía la antesala de la falsa embajada presentándose como el Dr. Koploviz, mientras que López de Letona se presentaba como "Canciller".  La necesidad que muchos militares desafectos, religiosos y familias conservadoras con recursos, atrapados  en la retaguardia madrileña, la necesidad, digo, que tenían de encontrar refugio, o mejor, pasarse a la zona rebelde, propició esta siniestra actividad, y otras de parecido pelaje, por iniciativa incluso de particulares desaprensivos, porteros de edificios de categoría, miembros de sindicatos a título propio, y que organizaron no sólo supuestas legaciones, sino autenticas expediciones al otro lado del frente, emulando a las que la quinta columna realizaba realmente, pero cuyo final era el despojo y la sangre. Es conocido en Cataluña el caso de los treinta y pico Maristas, también implicada la CNT, que desaparecieron en la frontera tras haber girado su congregación en el extranjero el precio del rescate y su paso a Francia.

Otro incidente digno de mención que ilustra perfectamente al personaje y de paso el ambiente de la retaguardia madrileña y en especial el de la CNT es que, policías de Cazorla, Delegado de Orden Público de la Junta de Defensa, estaban tras la pista de una hermosa mujer que había sido identificada como posible quinta columnista poseyendo pases firmados en el E.M. de la división de Mera, es decir Verardini. La pista provenía de un sonado caso de quintacolumnistas, el caso Felix Ciriza. Cuando fueron a detenerla se la encontraron en su casa con el propio Verardini, confirmándose la posesión de documentos del Estado Mayor de la 70 B.M. que sólo se los podía haber facilitado el citado. Detenido Verardini, es en esta ocasión cuando Mera montó en un camión a 25 soldados de confianza de su unidad, armados de fusiles ametralladores y de bombas de mano y se presentó en la comisaría amenazando con tomarla. Enterado Miaja, eterno componedor, ordenó la suelta de Verardini en vez de detener a Mera y fusilarlo por rebelión militar. Para Mera, que estaba obsesionado con los comunistas, todo era un complot comunista. Verardini pidió disculpas por su descuido (firmar falsos pases) y todos tan contentos. Todos no, pues Cazorla, de las JSU y entregado a su trabajo, se tiraba de los pelos, mientras el diario CNT de García Pradas se dedicaba a difamarlo y a amenazarlo de muerte. Pero Miaja mantenía el equilibrio de las fuerzas que defendían Madrid con mano muy ancha. Y todos recordaban el atentado contra el delegado de Abastos de la Junta, el comunista Pablo Yagüe que casi termina con una guerra abierta entre la CNT y el PCE y que al menos costó seis muertos de una y otra organización. (3)

Verardini se movía en selectos ambientes, como Negresco (4), ambientes donde conoció a una bella chica que había trabajado en Chicote y que se llamaba Antonia Bronchalo, con la que se casó durante la guerra en sonada boda en el IV Cuerpo de Ejército. Antonia Bronchalo fue con los franquistas artista de cine y también amiga del torero Manolete, aunque se la conocía con otro nombre. Cipriano Mera cuenta en sus memorias que esta mujer, después de la guerra denunció a su mujer por un falso robo de un abrigo de pieles. Muchos relatores identifican a esta mujer con la que los policías de Cazorla buscaban por posesión de pases falsos y encontraron en su piso con Verardini. Toda estas historias provienen de la Causa General de las declaraciones "hábilmente" arrancadas tras la guerra a republicanos que se dedicaron a contraespionaje. Algunas tienen poca credibilidad histórica pero apuntan por donde iban las cosas en estos personajes emboscados en el Ejército Popular y en la Junta Delegada de Defensa de Madrid, donde sus líderes civiles y militares, tenían potestad suficiente para proteger a todo tipo de personal, cualquiera que fuera su calaña. El propio Manuel Salgado, jefe de los Servicios Especiales de Madrid tenía escondidos a derechistas. Al final de la guerra, no era raro el detenido madrileño de relevancia que no se exculpara ante la (in)justicia franquista aduciendo haber escondido a derechistas.

Con el transcurso de la guerra y la mala fortuna de las armas republicanas, la poca actividad bélica del frente del Centro, la ausencia del gobierno, el virreinato de Miaja, sin apenas unidades fieles al gobierno de Negrín, propiciaron en la manos de Casado y la dirigencia de la CNT madrileña, un estado de derrotismo perverso (ya que usualmente supuso para muchos de estos derrotistas la muerte o la cárcel y como mínimo malos tratos), que llevó a la conjura de Casado, que fue urdida por este furibundo coronel anticomunista y tejida por la Quinta Columna madrileña a las órdenes del coronel Ungría del SIPM franquista. (5) Mera, verdadero artífice militar del golpe casadista, cuyo discurso en Unión Radio para declarar su adhesión al golpe constituye un ejemplo paradigmático de su personalidad, escapó en avión del aeródromo de Chiva con Liberino González, José Luzón y Antonio Verardini. Ningún promotor del golpe de Casado se quedó a probar su medicina excepto Besteiro que había perdido el norte y creía que los fascistas le iban a reconocer sus méritos por el fin de la guerra (es decir la derrota de la República) y su supuesta bonhomía. ¡Ingenuos! Con lo que graznaron en el exilio y en sus libros sobre la huida en avión de Negrín y de los comunistas. Se sabe que Verardini recaló en el Orán francés y que se alistó en la Legión francesa, probablemente obligado como muchos exiliados españoles en el Norte del África francesa. También militó en el antifranquismo anarquista tras la segunda guerra mundial.

(1) Sobre esto de las embajadas hay bastante controversia. En el registro al piso bajo protección de la embajada de Finladia se encontraron uniformes de falange y de militar, bombas de mano, armas cortas y automáticas, planos de las defensas republicanas, listas de fusilables tras la guerra, etc... En total fueron detenidas 180 mujeres y 345 hombres que fueron llevados a la cárcel. En cuanto a la embajada chilena, una de las más señaladas en estas historias, el agregado diplomático Morla Lynch escribió tras la guerra varias memorias de su época madrileña, donde denigraba a todo bicho viviente republicano, especialmente a las autoridades de la Junta de Defensa, sin ninguna aportación documental, haciéndose eco de habladurías y paparruchas. El caso es que asiló a miles de derechistas madrileños a los que sin duda salvó de la justicia republicana. Permitió no obstante actuar a quintacolumnistas y permitió depósitos de armas en sus pisos protegidos, y sólo se dio por enterado y las entregó para evitar el registro policial. Cuando llegaron los franquistas parece que asiló a algunos republicanos, pero según todos los relatores, y no sin señaladas críticas, con mucho menos entusiasmo.

(2) Verardini era también amigo de un tal Alfonso López de Letona, un calavera y un tipo de armas tomar, agente doble durante la guerra, que trabajaba igual para unos y para otros y que participó como gancho en lo de la embajada. Fue detenido por espionaje en 1937, liberado en 1939 con la entrada de los franquistas en Madrid y vuelto a detener por los franquistas y fusilado tiempo después, al parecer por denuncias de familiares de sus victimas. Hay una carta de López de Letona a Verardini desde la Dirección General de Seguridad que no tiene desperdicio. Transcribimos: "Querido Antonio: Hoy hago 70 días de detención, me han traído para firmar unas declaraciones que no se parecen en nada a las que presté y en las que aparecen los siguientes cargos: Que tú en combinación con Bonilla pensabais instalar nuevas embajadas y sacar dinero. Que por la de Siam habías sacado a los allí refugiados cuatro mil y pico pesetas y que cuando cerró ésta, los huéspedes habían sido fusilados por la CNT que los sacó en una camioneta. Hablan de que pertenecía a los Servicios Especiales del Ministerio de la Guerra, a las órdenes de un tal Salgado y un tal Pedro Labón (el pobre Orobón me figuro) He sido forzado a firmar todo esto y me apresuro en tu conocimiento por si fuera una maniobra del Partido Comunista (Cazorla) a la Confederación. Un fuerte abrazo de tu compañero. Alfonso.

(3) La versión de Cazorla, Delegado de Orden Público de la Junta Delegada de Defensa de Madrid, es muy distinta de la que cuenta Mera en sus memorias. Se encuentra en el Juzgado Especial de Contraespionaje (procedimiento nº 48.924)

(4) Conocido local nocturno dónde se citaban secretamente los quintacolumnistas. Los servicios secretos del gobierno (SIM y DEDIDE) lo sabían y allí se tejían las conspiraciones y la contrainteligencia. Hay relatores que aseguran que su importancia se ha exagerado.

(5) En opinión de M.B., el mayor error estratégico de la II República en guerra fue que el gobierno abandonara Madrid y dejar este teatro de operaciones en manos de Miaja, partidos y sindicatos, para terminar mandando el V Cuerpo (comunista) a Aragón cambiando el eje estratégico donde de ganar o empatar batallas (Jarama, Guadalajara y Brunete) a perderlas todas (Belchite, Teruel y la ofensiva de primavera franquista) y mientras en Madrid, Casado y Miaja derechizaban el Ejercito del Centro y Mera completaba la anarquización del IV Cuerpo. El comisario Piñuelas en su sesgado informe sobre la preponderancia del comunismo en el Ejército Popular nunca dijo como Mera y ayudantes laminaron la presencia comunista en el IV Cuerpo (que los tenía bien cerca), aspecto decisivo en el golpe de Casado.

Remigio Verdia

Este capitán de corbeta dirigía en Cartagena en 1936 la Escuela de Submarinistas de la Armada. Al inicio de la guerra se le confió el mando de una flotilla de submarinos. Era Verdia un marino inteligente y valeroso, sin duda uno de los más brillantes submarinistas con que contaba la flota republicana. El asesor naval ruso, Kutnetsov, hace de él verdaderos elogios, a pesar de ser un republicano moderado al margen de los extremismos. En julio de 1936, siendo comandante del submarino C-6, dispuso una arriesgada operación para burlar el bloqueo del puerto de Melilla; ya en su interior torpedearía los navíos rebeldes. Llevó a cabo la planeada operación, pero llegados al puerto el comité de a bordo se negó a disparar los torpedos. También fue Verdia el oficial que torpedeó en aguas del Cantábrico el Almirante Cervera, al mando de Moreno. Dio en el blanco, pero el torpedo no estalló, en opinión del almirante Moreno por lo escorado del tiro. Verdia murió en Málaga a principios del 37, probablemente víctima de un bombardeo.

Hemos recibido:

En los primeros días de la sublevación militar, Verdía se encontraba en Cartagena ocupando el cargo de Subdirector de la escuela de armas submarinas, no del de Director. El episodio del bloqueo de Melilla y la negativa del Comité para que Verdía lanzara los torpedos del submarino C-6, es erróneo, en esos días el C-6 lo comandaba Mariano Romero Carnero. Verdía no se hace a la mar como comandante de submarino hasta el 22 de agosto, el día 23 de ese mismo mes llega a Málaga como comandante del C-2, con el que se dirige al Cantábrico. El C-6 vuelve a Málaga en octubre de 1936 ya al mando de Verdía. El episodio del torpedo, según me comunicaron familiares de Verdía tampoco está contrastado. Málaga se habilita en esas fechas como Jefatura de flotilla a cuyo mando estará el eficiente capitán de corbeta hasta el día de su muerte el 2 de enero de 1937, en el que nueve aviones Junkers 52 bombardean intensamente la capital y el puerto arrastrando a la muerte a más de 50 personas, una de ellas el insustituible jefe de flota submarina, se encuentra enterrado en el cementerio San Miguel de la capital malacitana.

Un cordial saludo: Luis Miguel

Gracias Luis Miguel...

El fotógrafo Vivanco sacó esta instantánea de Eustasio Amilibia Machimbarrena (izquierda) El lendakari Aguirre (Centro) y el coronel Vidal en Bilbao 1937

Joaquín Vidal Munárriz (1882-1939)

Teniente coronel de infantería jefe del Batallón de Montaña Garellano nº 6 acantonado en Bilbao. Leal a la República organiza una columna mixta de tropas regulares y milicianos y cerca ya de Villarreal es bombardeada por aviones rebeldes y la tropa totalmente desconocedora de la guerra aérea queda completamente desmoralizada defendiendo sus posiciones a duras penas. Bregar con gente inexperta en un ataque aéreo es muy difícil y así debió ser la tarea de Vidal Munárriz para contener la baja moral de su columna. Aguirre lo ascendió a coronel y participó en la batalla de Villarreal donde se demostró que los ejércitos hechos de papel de oficina (sin apenas armamento, sin instrucción y sin disciplina) que tenían su chance defendiendo la tierra vasca eran incapaces de avanzar sin artillería y sin aviación cuando los de enfrente eran tan tenaces en la defensiva como ellos mismos. La guerra siguió y Vidal mandó la 2 división siendo sustituido por Nanetti del XIV Cuerpo, cuerpo que mandó hasta la derrota de  Santander. Después de la pérdida de Asturias, Vidal regresó a la zona republicana y mandó el XIX Cuerpo en noviembre de 1937 pero no entró en acción en Teruel y tuvo ese mando hasta el final de la guerra combatiendo en la defensa de Valencia donde recibió la medalla del valor. Apoyó el golpe de Casado como todo el Ejercito de Levante. No se exilio, ignoramos por qué, quizá no pudo y tras ser detenido y enviado a Bilbao, donde fue juzgado, y condenado a muerte fue fusilado en agosto de 1939 pues había prisa pues había muchos en cola.

El  coronel Vidal Munárriz con otos republicanos en la retaguardia del frente de Levante.

Medalla del Valor pensionada 1000 pta. anuales  por cinco años. La Gaceta 22-06-1938.

Gabriel Vidal Úbeda (1909-1982). 

Teniente de Artillería, instructor de las milicias socialistas y conocido como "El Rubio", con destino en el Parque de la Primera División Orgánica. Actuó junto a las milicias; y en la mañana del lunes 20 de julio tuvo a su cargo las piezas de Artillería que bombardearon el Cuartel de la Montaña. Se le consideró factor decisivo para la derrota de los sublevados. Su padre también actuó en esta refriega. Ascendió a capitán en octubre de 1936 y a mayor en 1938 y se exilió a Francia y luego a Méjico donde murió en 1982. Se ganó la vida en el exilio trabajando de ingeniero.

José Vila Cuenca (1898-1981)

Ingeniero civil valenciano militante desde joven de UGT y del Partido Socialista. Era secretario general de la UGT catalana y fue candidato al PSOE por Barcelona. Al inicio de la II República era director del diario La Tribuna Socialista. Se sabe que tuvo problemas de finanzas con su sindicato y que por ello fue sancionado. En julio de 1936 se unió a las Milicias Populares y tras los combates en la propia Barcelona participó en la invasión de Mallorca. Ingresó en el Instituto de  carabineros y pronto accedió al mando de la 179 Brigada Mixta y sobre todo la 3 Brigada Mixta que era un unidad de carabineros. Ascendido a teniente coronel le toco defender Barcelona y la retirada a la frontera de la 56 división. Tras instalarse en Francia la situación se hizo insostenible con la invasión alemana y pudo embarcar en el Nyassa y arribar a Méjico donde militó en el PSOE.

 

José Eduardo Villalba Rubio (1882-1960)

Coronel de infantería que había servido en la Legión en África y que estaba comprometido con la rebelión pero que llegado el caso y vista la suerte de Goded y los suyos en Barcelona optó por mantenerse al servicio de la II República pero sólo para salvar la vida. Una situación muy fastidiada tanto para los republicanos como para los rebeldes, más teniendo en cuenta que toda su familia era de rancia tradición militar y reaccionaria y combatía con Franco. Después de actuar como asesor militar de una de las columnas anarquistas de Aragón, mandó una División del Ejercito de Cataluña y posteriormente fue nombrado para defender Málaga un destino muy conflictivo desde luego para cualquiera menos para un leal geográfico que aspiraba probablemente a pasarse al enemigo en cuanto pudiera aprovechando algún arranque de bemoles. Pero no hubo manera. Su actuación en Málaga es completamente penosa, como jefe del sector abandonó la ciudad ante el ataque italiano y el propio general subsecretario, Asensio, le obligó a volver, orden que desobedeció limitándose a crear con las pocas tropas que tenía de una línea de contención en Motril y que gracias a la llegada de refuerzos internacionales resistió. La pérdida de Málaga puso en peligro al gobierno de Largo Caballero y la presión política de los partidos del Frente Popular obligo a iniciar investigaciones sobre el propio Asensio (1), Villalba y los generales Martínez Monje y Martínez Cabrera. Villalba fue encausado y detenido y así pasó la guerra hasta 1939 en que el gobierno le rehabilitó para darle la patata caliente de la Comandancia Militar de Gerona provincia que se perdía por días. Villalba pasó a Francia y allí estuvo hasta que en 1950 probablemente por consejo de su familia decidió regresar. Fue encausado y condenado pero la sentencia le fue muy favorable y abochorna leerla y que el SIM republicano no le hubiera fusilado por traidor pues todo el mundo lo sabía, pero así eran las alturas del Ejercito Popular. Franco le reconoció el grado de coronel y le devolvió los derechos pasivos, Villalba pertenecía a una de esas familias militares que lo son todo en el ejército español. No es de extrañar la mirada apesadumbrada que tiene este militar en todas las fotos que se le hicieron el campo republicano. Murió en Madrid en 1960.

 

(1) Se dice que Asensio lo envió para quitárselo de en medio, quizá antes del 18 de julio se habían visto en alguna reunión conspirativa. Se dice.

Agustín Vilella Freixas

Ascendido a mayor de milicias y nombrado en el D.O. del Ministerio de Defensa en julio de 1937. Muy probablemente era mando en alguno de los batallones de la 84 brigada mixta que no se amotinaron y que tras el fracaso del ataque al Muletón fueron integrados en la 123 brigada mixta que precisamente tomo el numeral de la 84 brigada mixta. En la primavera de 1938 Vilella tomó el mando de la remozada 84 brigada mixta. A finales de año, Vilella fue destinado al mando de la 93 brigada mixta. Nada más sabemos de este personaje.

Luis Villena Ramos

Coronel de la Guardia Civil, jefe del XII Tercio, con Plana Mayor en Burgos. Se opuso a la rebelión, por la cual lo detuvieron los sublevados victoriosos y lo condujeron al Cuartel de San Marcial. El jefe falangista, Manuel Hedilla, evitó que fuera posteriormente asesinado en una saca de presos consiguiendo su conmutación a cadena perpetua.

Francisco Viñals Guarro (1915-2011)

Piloto de Chato. Nació en Barcelona en 1915. Ingresó en Aviación en enero de 1937 para realizar el curso de piloto. Ingresó en Alcantarilla el 28 de enero. Salió con el título de piloto el 14 de abril, siendo destinado al aeródromo del Prat para protección de costas y pilotando aviones Nieuport 52. En este destino permaneció hasta el 14 de agosto en que ingresó en la escuela de alta velocidad del Carmolí, a finales de octubre pasó a la escuela de Alcantarilla como ayudante de profesor, volando aviones Farman, Moth e Hispano. A primeros de Diciembre fue destinado a la 4ª Escuadrilla de Chatos con base en Sabadell, pasando el 13 de diciembre a la 2ª Escuadrilla con base en El Toro (Teruel). En esta escuadrilla realizó toda la guerra, siendo promovido a jefe de la misma el 3 de diciembre de 1939. El 29 de marzo dirigió la formación de 12 Chatos que realizaba la entrega del material de aviación al ejército Nacional en Barajas. Ascendió a sargento el 05-04-37 (GR 99 del 09-04-37) y a teniente el 22-02-38.

 

  Fuente:

Nota.- En un combate de cazas rebeldes y republicanos en febrero de 1938 durante la batalla de Teruel, Viñals recibió el choque del CR-32 del capitan Hayas contra su aparato, siendo Hayas encontrado muerto en tierra junto a su aparato, mientras que Viñals pudo aterrizar. Este incidente le persiguió toda su vida y los franquistas le acusaron de asesinato.

A este respecto ADAR publicó el siguiente parráfo (Icaro - 124):

Viñals será juzgado en consejo de guerra por auxilio a la rebelión con petición de pena de muerte. Después 25 años de reclusión, luego 8 años y finalmente 2 años y 3 meses de cárcel, sentencia que cumplió por un delito que no había cometido. Durante este juicio y como relataba también Joaquín Calvo, el fiscal que los juzgaba llamó a declarar a la mujer y al hermano del mismo Carlos de Haya, preguntando a ambos por el asesino o asesinos de su marido. La respuesta de la viuda y el hermano fue que Haya no había sido asesinado, sino muerto en un combate mantenido en el frente. Esta actitud honrosa y sincera pese al dolor de la perdida del esposo y el hermano respectivamente, ayudó muy posiblemente a que la condena no fuera de consecuencias peores para el grupo de aviadores republicanos.

Matías Yagüe

Madrileño de la zona de la Sierra, era leñador al parecer, dirigente del PCE y miembro fundador del Quinto Regimiento. Creo la fuerza especial de la 11 división por encargo de Lister. Mandó luego la 9 Brigada Mixta y resultó muerto en la batalla del Ebro al frente de esta brigada. Hay relatores que dicen que fue propuesto para la Placa Laureada de Madrid pero no aparece en las lista de propuestos..

Antonio Yáñez-Barnuevo

Capitán de artillería de la promoción de 1922 de la academia de Segovia. Miembro del grupo de artilleros contrarios a la dictadura de Primo de Rivera, participó en una demostración contra la dictadura y fue condenado a un año de prisión a la par que el dictador disolvía temporalmente el Arma de Artillería. Repuesto tras la dictadura se le destinó al regimiento de Artillería de costa de Cádiz. Opositó al cuerpo de Carabineros donde ascendió a capitán. Fue enviado a Cádiz como responsable de las fuerzas de seguridad. Al mes de llegar se produjo la sublevación de los generales López-Pinto y Varela. Yañez reaccionó con presteza y tras valorar su falta de efectivos para enfrentarse a las fuerzas sublevadas, junto con el gobernador civil, Mariano Zapico y el presidente de la Diputación Francisco Cossi y otros republicanos decidieron atrincherarse en el gobierno civil con un centenar a voluntarios, guardias y oficiales. Eran las cuatro de la tarde del 18 de julio. Bombardeados con artillería y asediados por  regulares, se tomó la decisión de rendirse. Tras lo cual fueron maltratados de palabra y obra, procesados en sumarísimo de urgencia y condenados a muerte las figuras más señaladas. A principios de agosto Antonio Yañez-Barnuevo fue fusilado junto con sus compañeros. A los guardias de asalto y a otros paisanos que participaron en la defensa del gobierno civil, los fusilaron directamente sin tramites legales de ningún tipo. En la imagen el capitán Antonio Yáñez-Barnuevo probablemente de una fotografía de la orla de la promoción de la academia de Segovia

 

Antonio Yañez Piñeiro

Oficial de segunda del Cuerpo Subalterno de la Armada que al iniciarse el conflicto se mantuvo leal a la República. Mando al final de la Guerra la Flotilla de Guardacostas y defensa Antisubmarina de Cataluña, cuyas unidades se internaron en Francia. En la imagen con uniforme de Capitán de Corbeta de la Marina republicana. Se exilio a Méjico donde llevó una vida prospera de industrial.

 

 Información e imagen: Alicia Yañez

Amadeo Ynsa Arenal (1888-1936)

De pie: Amadeo Ynsa, cuando era cadete en la academia de Infantería de Toledo (1906-1909)En el momento de estallar la sublevación era comandante de Infantería y residía en Tarragona con su familia. Permaneció leal a la República y hacia el 20 de julio de 1936 marchó al frente, donde murió el 4 de agosto del mismo 36, en Sástago. Dejó viuda y cuatro hijas menores de edad. Sus restos fueron devueltos a Tarragona, donde una multitud los despidió camino de Mahón, donde lo enterraron. Al poco de morir, fue ascendido a teniente coronel, ascenso que ya se estaba tramitando antes. Era navarro, de Villafranca, y había nacido en 1888. Hijo de militar, fue cadete en Toledo. Hizo la campaña de África 1922-27 y recibió varias medallas: 2 cruces al Mérito militar de 1ª clase, una cruz de San Hermenegildo y una medalla a la Constancia Militar.

 

 

 

 

Fuente e imágen: Marina Pino Ynsa.

A la izquierda y de pie, Amadeo Ynsa cuando era cadete de la Academia de Infantería de Toledo (1906-1909)

Visite la página dedicada a su biografía

Miguel Yoldi Beroiz

Conocido militante navarro de la CNT catalana que había sido Secretario General de la organización  a inicios de 1936. Al inicio de la guerra se unió a las Milicias Confederales, columna Durruti, donde tenía plaza en el Comité de Defensa de la columna. Partió para Madrid con parte de la Columna y con Durruti al frente y se sabe de sus afanes para templar los nervios de la columna tras una desbandada pues eran tropas novatas en la dura guerra de posiciones del frente de Madrid. Con la militarización tuvo una serie de puestos y sustituyó a Pérez Farras al mando de la columna Durruti ya militarizada como 26 División. Fue nombrado Comisario Político y su principal destino fue de Delegado de Guerra en junio de 1937 destinado en la Sección de Operaciones del Ejercito del Este. Hay otra entrada donde costa que tuvo el mando en diciembre de 1937 de la 24 División, una unidad con un historial variado de influencias políticas de la CNT y del PCE. La división fue disuelta en marzo de 1938 y vuelta  a organizar y Yoldi ya no recibió ningún mando militar activo. Se exilio a Francia con su familia y luego pudo partir para Méjico.

 

Alejandro Zamarro de Antonio

Republicano convencido, este artillero había apoyado la sublevación de Sánchez Guerra, siendo capitán en el primer regimiento de Artillería Ligera de guarnición en Ciudad Real. Fracasada la intentona, Zamarro fue condenado a muerte junto con el coronel del regimiento, Joaquín Paz, pero el Tribunal Supremo de Guerra y Marina anuló las sentencias. En julio de 1936, ya especializado en la defensa antiaérea, el capitán Zamarro mandó la columna Hilarlo-Zamora, aunque en seguida se hizo cargo del grupo DCA (Defensa Contra Aeronaves), con base en Carabanchel. Ascendió en noviembre y fue trasladado a Madrid. Con el grado de comandante tomó parte en la batalla de Brunete al mando de la DCA del II bis Cuerpo de ejército. Luego desempeñó el cargo de jefe de la artillería antiaérea del GERC (abril del 38). Por estas mismas fechas ascendió a teniente coronel. La poca eficacia demostrada por este jefe, hecho al que habría que añadir la falta de municionamiento de las piezas a lo largo de la batalla del Ebro, fue causa de su destitución.

Miguel Zambudio Martínez.

Nació el 2 de setiembre de 1918 en la localidad de Puente-Tocinos (cerca de Murcia), al empezar la guerra se incorpora al aeródromo de Reus, donde avería en poco tiempo tres Nieuport 52, según Gayoso. A pesar de ello pasa a la Escuela de Caza, y de allí al Norte, el 23 de marzo de 1.937 a donde se trasladó a bordo de un Douglas DC-2; durante una semana Zambudio voló en los inadecuados cazas checos Letov S-231 y más tarde pasó a pilotar los Polikarpov I-15 Chato. En esta época había volado ya en Tiger Moth, Hispano, Breguet, Miles, Caudron, Fleet, Morane, Gourdou, Koolhoven, Avro y Nieuport. Cuando aparecía algún buque nacionalista en la zona (por ejemplo, el destructor Velasco), los pilotos de los Chato cambiaban su montura por el Gourdou-Leseurre GL-32, capaz de llevar armamento de caída. Con un GL-32, Zambudio bombardeó en picado el acorazado enemigo España, al que alcanzó (según su versión) con una bomba de 100 kg en la cubierta, acertando en un pañol de municiones, y hundió. (Según otras fuentes, el España chocó contra una mina o fue hundido por un submarino.). Al finalizar la campaña del Norte es ascendido a teniente (Orden de 19-9-37; Diario Oficial nº 228). Integrado en la 3ª Escuadrilla de Chatos, Zambudio participó en cuantos combates libró su unidad, demostrando tal capacidad que, cuando el jefe de la escuadrilla, Juan Comas, resultó herido en mayo de 1938, Zambudio, le sustituyó en el mando de la unidad. Promovido al empleo de capitán (D.O. nº 295 del Ministerio de Defensa, de 11-11-38), Miguel Zambudio remplazó de nuevo a Comas, esta vez al frente del 26.o Grupo de Chatos, cuando éste resultó herido en Monjos, en noviembre de 1938. Al mando de su nueva unidad, Zambudio participó en las batallas defensivas libradas a finales de 1938. El 24 de diciembre, en el curso de una misión en la que volaba al frente de su grupo sobre la cabeza de puente de Serós, Zambudio fue alcanzado en un combate contra aviones Fiat CR.32 y Messerschmitt Bf 109. Con el nervio ciático de un muslo prácticamente seccionado la guerra concluyó para Miguel Zambudio. Trasladado a Francia en camilla, Zambudio padeció en aquel país las amarguras de la segunda guerra mundial y, cuando finalizaron las hostilidades, fijó su residencia en Francia. Aunque regresó a España a mediados de los años cincuenta, Zambudio, promovido al empleo de comandante durante la guerra civil española (aunque su ascenso no se hizo oficial al desaparecer el Diario Oficial de la República), sigue residiendo en Francia y pasa algunas temporadas en su Murcia natal. En el caso de Miguel Zambudio Martínez todos los datos coinciden en aclamarlo como el máximo as de la caza republicana: Jesús Salas le atribuye 17 derribos confirmados, mientras que el propio interesado reclama 24 seguros y varios probables y compartidos. Sea como fuere, y dejando a un lado las conjeturas, Zambudio fue uno de los cazadores y jefes de unidad más destacados conque contó la República. Vuela sobre el acorazado España el día de su hundimiento, despegando de Santander. Al finalizar la campaña del Norte es ascendido a teniente (Orden de 19-9-37; Diario Oficial nº 228). En 1983 llega a jefe de la 3ª escuadrilla de Chatos y en noviembre del mismo año a jefe del grupo 26, en sustitución de Comas. En este momento fue ascendido a capitán (D.O. nº 295 del Ministerio de Defensa, de 11-11-38). Miguel Zambudio vivió el resto de su vida en Francia, donde falleció  el 18 diciembre de 1996

   

Fuente:

Sebastián Zamora Medina (1899-).

Había nacido en el pueblo de Plan (Huesca) Traspasar por la academia de infantería fue enviado a África donde sirvió por diez años hasta 1931 y conocía a todos los  que significaban algo en las innumerables campañas que desde 1921 hasta 1927 se sucedieron en África. Al inicio de la guerra era ya capitán y se mantuvo leal a la República. Mandó una de las primeras columnas de Aragón y hasta tuvo mando en la controvertida 29 división del POUM y que tras ser disuelta Zamora medina pasó a mandar la 16 División a finales de 1938. Trabajó en el E M del Ejército del Este y mandó una División en el Ebro, pero no sabemos cual. Al final de la campaña de Cataluña se exilió a Francia y parece que regresó tras los años. Naturalmente fue procesado, condenado y tras un periodo breve en prisión fue indultado pero perdió derechos pasivos al ser separado del ejercito. Así que lo de africanista no le sirvió de nada.

Eduardo Zamora Conde.

Oficinista afiliado a Izquierda Republicana que se alistó voluntario en las Milicias Populares. Alcanzó el grado de mayor de milicias en el Ejército popular inscribiéndose en el PCE. Sirvió en varias brigadas, mandando temporalmente la Primera  Brigada Mixta, de la elitista 11 División y en la 150 Brigada Mixta que cubría el frente madrileño de la propia capital, después de la batalla de Brunete. Mando que mantuvo hasta que en marzo de 1939, los casadistas depuraron a todos los mandos de la brigada, entre los que se encontraba Zamora, que había evolucionado al PCE desde Izquierda Republicana. Detenido y procesado por los franquistas y gracias a avales de personas desafectas protegidas por Zamora, sólo fue condenado a 20 años y un día, aunque se chupó ocho años de cárcel, pues hasta 1946 no salio en libertad condicional.

   

Mariano Zapico Menéndez-Valdés

Militar de artillería de la promoción de 1912 de la academia de Segovia. Combatió en África y pertenecía al circulo de artilleros que conspiraban contra la Dictadura de Primo de Rivera junto con Saravia, Rodrigo Gil, Antonio Cordón y otros. Un poco antes de la guerra mandaba el Grupo de Artillería Antiaérea nº 1. En 1936 fue nombrado gobernador civil de Cádiz en sustitución del anterior gobernador que dimitió a raíz de la quema de varias iglesias en Cádiz. Este nombramiento sería fatal para Zapico, pues opuesto a la sublevación, junto con las autoridades legales y un centenar de republicanos se atrincheraron la tarde del 18 de julio en el gobierno civil liderados por el valiente capitán de artillería Antonio Yañez-Barnuevo. Atacados por artillería y tras un breve parlamento que permitió salir del gobierno a varios civiles, a la mañana siguiente los regulares iniciaron el asalto y los republicanos se rindieron. Los detenidos con autoridad fueron incoados rápidamente y a finales de julio juzgados y condenados a muerte, Zapico, el presidente de la Diputación, Francisco Cossi, el teniente coronel de carabineros Leoncio Jaso, el capitán de fragata Tomás de Azcárate, el capitán Antonio Yáñez-Barnuevo y otros miembros de la izquierda gaditana. La mano cruel de López Pinto y Varela, generales sublevados se notó en esta tragedia. A principios de agosto se cumplieron las sentencias. Documentos encontrados posteriormente a un testigo presencial de los hechos del 18 al 19 de julio en Cádiz ponen la nota sobre la gallardía y la honorabilidad de este artillero de pro.

 

   

 Manuel Zarauza Clavero.

Nació en la localidad montañesa de Santoña el 3 de noviembre de 1917. Manuel Zarauza ingresó en la aviación republicana en noviembre de 1936 como soldado voluntario, capacitándose como piloto de caza en la Escuela de Pilotos de Santiago de la Ribera (Murcia) a cuyo término fue ascendido a sargento y asignado a una escuadrilla de biplanos I-15 "Chato", la que había sido la Escuadrilla "Palancar" y después la Escuadrilla "Lacalle", mandada en aquella época por Manuel Aguirre, y el 24 de mayo de 1937 fue enviado a la Zona Norte (frente cántabro), junto a otros pilotos que más tarde se convertirían en ases de la especialidad y jefes de unidades (Riverola, Comas, Bastida ....). Zarauza tripulaba uno de los "Chatos", pero un fallo del motor producido poco después de despegar, le obligó a regresar al aeródromo de partida. A continuación pasó a la Escuela de Alta Velocidad de El Carmolí, donde recibió doble mando en el UTI-4 ("Mosca" biplaza), siendo destinado después a la 3ª Escuadrilla de "Moscas". En noviembre de 1937, cuando se hallaba integrado en la 4ª Escuadrilla de Moscas, Zarauza fue ascendido a teniente y se le confió el mando de la unidad, en sustitución del soviético Shimelkov. El 15 de diciembre la 4ª de Moscas intervino por primera vez en la batalla de Teruel, durante la cual se pusieron de manifiesto las dotes de mando de su nuevo jefe. Más tarde, la unidad fue destinada a contener el avance nacionalista sobre Levante, y operaba desde Reus, Sarrión, Liria, Valls, Vendrell y otras localidades, enlazando, combate tras combate, con la reñida batalla del Ebro. En el transcurso de ésta, el 5 de julio de 1948, Eduardo Claudín, jefe del Grupo 21 de Moscas, fue abatido por la artillería antiaérea de los rebeldes en la vertical de Puebla de Valverde. Zarauza, que el 11 de marzo de 1938 había recibido su despacho de capitán (según el Diario Oficial n.° 60), fue puesto al mando del Grupo 21, mientras Antonio Arias Arias le sustituyó al frente de la 4ª Escuadrilla. Zarauza, que se había ganado el apelativo de "el piloto fantasma" debido a que su corta estatura hacía que apenas se le viese cuando se sentaba a los mandos de su avión, intervino al frente de su unidad en los combates en defensa de Cataluña y fue ascendido al empleo de comandante por méritos de guerra. Cuando el frente de Cataluña se hundía irremediablemente, Zarauza decidió refugiarse en Francia con su avión para impedir que ambos cayeran en manos del enemigo donde fue internado en el campo de Argelés-Sur-Mer. Algún tiempo después, pudo trasladarse a la Unión Soviética fijando su residencia, en Jarkov, donde trabajó hasta que, en plena II GM, las tropas alemanas se acercaban a la ciudad, en su avance, siendo evacuado junto a otros pilotos españoles. Zarauza se presentó voluntario en el Ejército Rojo, del que pasó a la Fuerza Aérea soviética, en la que luchó alcanzando el grado de coronel. Pereció el 12 de octubre de 1942, en Bakú cuando realizaba un simulacro de combate con el sargento Sasha Riápishevt recién llegado a su unidad, colisionando ambos I-16, que cayeron a tierra. Contaba Zarauza con más de 30 victorias aéreas (10 en España) y había participado en un centenar de combates aéreos. Fue uno de los más destacados pilotos de caza con que contaron las Fuerzas Aéreas Republicanas Españolas. De Zarauza, que tiene en su haber diez derribos confirmados y varios probables y compartidos, se dice que fue uno de los mejores pilotos que volaron en el monoplano de caza soviético Polikarpov I-16 «Mosca». Muchos compañeros suyos recuerdan todavía la facilidad con que Zarauza ejecutaba todo tipo de acrobacias con el I-16, realizando incluso pasadas en vuelo invertido a escasos metros del suelo, una maniobra que ningún piloto soviético en su sano juicio llevó a cabo jamás con este tipo de avión. De la capacidad de Zarauza como piloto, Andrés García Lacalle escribe lo siguiente en su libro Mitos y verdades: "Volaba el I-16, como lo demostró en una exhibición que realizó en la escuela de Kirovabad, con increíble perfección. El piloto de pruebas ruso (piloto número uno de la URSS y probador oficial del "Mosca") y Zarauza tomaban tierra con el monoplano en el mismo espacio que podía necesitar una avioneta, cuando su velocidad de planeo recomendada era no inferior a los 165 km./h.

Fuente:

Joaquín de Zulueta Isasi

Oficial de Caballería destacado en las Fuerzas Aéreas, había conspirado contra Primo de Rivera, y fue expulsado del ejército en 1935. Reingresado en 1936, mandó columnas milicianas y las 38 y 3 Brigadas Mixtas. Tuvo veleidades comunistas durante algún tiempo, probablemente para hacerse perdonar que era de ideología carlista antes de la guerra peo el caso es que en octubre de 1938 abandonó el PCE. En 1937 estuvo al frente de la 7 División, permaneciendo en ese puesto hasta que el coronel Casado le encomendó el mando del II Cuerpo en marzo de 1939 en sustitución del coronel Bueno. Los franquistas le condenaron a 30 años que le fue conmutada a 12 años y un día, gracias a su buenos avales derechistas, saliendo en libertad vigilada en 1942.

 

 

  

Rev. 5.3 May  2025. - SBHAC Nº 1.4